Ecuador

VIAJE DE FEBRERO DEL 2012

País muy interesante que no te deja indiferente, ya que mezcla enormes bellezas naturales, con una gran cantidad de buenas experiencias que nos da su gente. Además poseen según nuestra opinión, el mejor lugar del Mundo  para estar, que son las Galápagos. Tiene una red de autobuses excelente, y transporte en general muy barato con buenos hoteles y una comida barata. La única «pega» es que no se debería hacer la parte continental en épocas de lluvias pues apenas hemos visto las cimas de los famosos volcanes.

Quito, Baños, Galápagos, Mercado de Otavalos, Cuenca

GALERÍA DE FOTOS

Introducción
Es un país fantástico para viajar en el que uno puede estar más relajado que su vecino del Sur. No tiene tantas cosas para hacer o ver como otros países pero lo compensa con gente amable y acogedora.

Fecha del viaje
Salimos de Barcelona el 25 de Diciembre del 2011 pero llegamos a Ecuador en nuestro periplo sudamericano el 27 de enero y salimos el 17 de febrero del 2012.

Itinerario
Día 1 MANCORA – GUAYAQUIL
Día 2 GUAYAQUIL – CUENCA
Día 3 CUENCA
Día 4 GUALACEO – CHORDELEG – SIG SIG
Día 5 CUENCA – ALAUSÍ
Día 6 NARIZ DEL DIABLO – RIOBAMBA – AMBATO – BAÑOS
Día 7 BAÑOS – RUTA DE LAS CASCADAS – LATACUNGA
Día 8 LATACUNGA – SAQUISILI – ZUMBAHUA – QUILOTOA
Día 9 LAGUNA DE QUILOTOA – LATACUNGA – QUITO
Día 10 QUITO – OTAVALO –QUITO
Día 11 QUITO – LA MITAD DEL MUNDO – TELEFERICO – QUITO HISTORICO
Día 12 QUITO – ISLAS GALAPAGOS
Día 13 ISLA SANTA CRUZ – TORTUGA BAY – RANCHO DE GALAPAGOS GIGANTES – ISLA SANTA CRUZ
Día 14 SANTA CRUZ – LAS GRIETAS – ISABELA
Día 15 ISLA ISABELA
Día 16 ISABELA – SANTA CRUZ – SAN CRISTOBAL
Día 17 SAN CRISTÓBAL- CENTRO DE INTERPRETACIÓN – CERRO LAS TIJERETAS – PLAYA DEL AMOR – LA LOBERIA
Día 18 SAN CRISTOBAL – ISLA LOBOS – LEON DORMIDO – PLAYA OCHOA
Día 19 SAN CRISTOBAL – CEIBA GIGANTE – LAGUNA EL JUNCO – GALAPAGUERA DE CERRO COLORADO – PUERTO CHINO
Día 20 SAN CRISTOBAL – QUITO
Día 21 QUITO – TULCAN – RUMICHACA – IPIALES – PASTO


Moneda
La moneda de Ecuador es el Dólar americano (conversor). Las monedas las hacen allí mismo pero los billetes son los mismo que los americanos. Hay problemas puntuales de cambio pues no hay demasiada moneda. Eso si, lo máximo que suelen aceptar son los billetes de 50 $. Nadie cambia un billete de 100 $

Nivel de vida

Es muy barato todo, a pesar de que se pague todo en la divisa americana. Se ha de contar que el transporte vale 1$ por hora de viaje. Se come por menos de 2 dólares.

Coste por persona

El vuelo lo hicimos con AIR FRANCE (KLM) y nos costó 1100 euros. El resto de los costes se especifican en el relato

Visado
No se necesita visado para los ciudadanos españoles. Pasar por su frontera es rápido desde Perú y sin problemas aunque recomendariamos hacerlo de día.

Salud
Es obligatorio la vacuna de la fiebre amarilla y te pueden pedir su carnet a la llegada al país, cosa que ponen en muchos países pero que nunca lo hemos tenido que enseñar. Muy importante tomar profilaxis de la malaria si vas a la selva (os evitaré la polémica sobre cual es mejor), tifus, meningitis, etc… Hay que consultar con los expertos.

Seguridad

Es un país seguro aunque probablemente roban carteras y equipajes en los buses pero no creo que la incidencia de robos de caracter violento sea un problema. Igualmente recomendamosno salir de noche por ciertos barrios, especialmente Quito donde si que vimos indicios de graves problemas cuando oscurece. Vale preguntar en los hoteles antes de salir sobre que barrios se ha de tener cuidado. Tiene mucha fama de insegura Guayaquil pero de día no creemos que haya ningún problema grave

Transporte

Avión. Los vuelos internos tiene dos precios: para extranjeros y para nacionales. Cuando se compra el billete se ha de especificar este punto.
Taxis . Son muy baratos y en bastantes ciudades tiene precio fijo hagas el recorrido que hagas. Siempre se ha de pactar el precio pero, en general, son honrados. No se ha de coger de noche un taxi que no sea oficial o que no haya sido llamado por el hotel. De día elegir taxis oficiales y que tengan un conductor que inspire confianza. ( nosotros elegimos gente mayor)
Buses. Lo mejor de Ecuador si hablamos de cosas prácticas. Hay muchos y son baratísimos

Electricidad
Los enchufes son los de clavija plana a 110 Voltios. Hay que llevar conversor pues en los hoteles no tienen

Clima

Fuimos en febrero que es mala época porque hay muchas lluvias y las montañas (volcanes) están con niebla.

Diferencia horaria
Es 6 hora menos al horario peninsular.(7 en las Galápagos)

Guía de viaje

Hay muchas pero nosotros sólo llevábamos la Lonely Planet y los relatos de otros viajeros

Diario del viaje

Día 1

MANCORA – GUAYAQUIL

Nos hacen el desayuno en el hotel un cuarto de hora antes, porque el bus en teoría llega a las 8 y media a Máncora. Son muy amables Martín y Silvia, nos encontramos como en casa.

Como sale de Lima, la hora es aproximada. Desde aquí a Guayaquil cuesta 95 soles por persona.

Llegamos a la terminal y salimos 1,5 horas después de la hora prevista.

En el bus nos dan los papeles de entrada a Ecuador para rellenarlos.

A las dos horas llegamos a Tumbes y media hora después a la frontera. Nos ponemos todos en fila para sellar pasaportes, nos dice el azafato que no saquemos por seguridad nada del bus, solo pasaporte.

Como a Elena le quedan algunos soles, vamos a los cambistas que hay en el mismo vestíbulo de inmigración y les decimos cual es el tipo de cambio nos dicen 2,9 pero nosotros decimos que 2,67 y ellos aceptan. Cogen la calculadora y hacen una maniobra que no vemos y le salen que nos tienen que dar por 260 soles 69 $. Al momento no nos damos cuenta pero unos minutos después vemos que nos han timado, volvemos y aún quieren tener razón, como nos estamos poniendo un poco violentos, dicen que les devolvamos los dólares que nos devuelven los soles. SON UNOS TIMADORES, MUCHO CUIDADO, NO CAMBIAR NUNCA AQUÍ.

Hemos tardado 45 minutos en pasar todo el bus el control de inmigración, aunque hay 3 personas que hacen que tardemos otros 45 minutos en salir de la frontera ya que tienen problemas varios.

El azafato dice que si alguna persona tiene problemas en la frontera de Ecuador se le dejará allí, porque llevamos mucho retraso con la hora prevista de llegada. En esta frontera es más ágil el proceso.

Ya estamos en Ecuador, y durante muchos, pero que muchos km, vemos plantaciones de plátanos.

A las 8 de la noche llegamos a Guayaquil, con un tormentón de cuidado. Después nos enteramos que han muerto incluso dos personas porque un muro se derrumbó y las aplastó.

Cogemos un taxi que nos cobra 5 $ por llevarnos al hostal Suites Madrid. Nos cuesta la triple 50 $, con baño, aire acondicionado y televisión.

Salimos a cenar algo y lo único que encontramos cerca en una Chifa en la que cenamos algo por 12 $.

Nos acercamos al parque Centenario que es una plaza situada en la avenida 9 de Octubre. Es la más grande de Guayaquil y se encuentra a medio camino entre el rio Guayas y el Estero Salado. Ocupa 4 manzanas de jardines bien cuidados con gatos, bancos y monumentos, entre los que destaca la columna de la Libertad rodeada de los fundadores del país.

Día 2

GUAYAQUIL – CUENCA

Por la mañana salimos a desayunar y después de intentar cambiar en algunos bancos los soles, tenemos que cambiarlos a un cambio no bueno a unos cambistas que hay a la puerta del Banco de Ecuador, ya que ni en el banco central los cambian.

Iglesia de San Francisco en Guayaquil

Nos acercamos al Parque Bolívar donde vemos un grupo de iguanas terrestres, algunas de más de 1 metro de longitud, que viven en el centro. Este es uno de los insólitos atractivos de uno de los parques más famosos de la ciudad, conocido también como Parque Seminario. Hay en unas “piscinas” muchas tortugas de distintos tamaños, que les están limpiando los caparazones ya que tienen muchas impurezas. En los arboles hay ardillas muy juguetonas. En los alrededores se concentran gran parte de los hoteles de lujo de la ciudad.

Al oeste del parque Bolívar está la Catedral, data de 1978, es sencilla y moderna a pesar de su elaborada puerta principal.

Iguanas en el Parque Bolívar

De aquí nos acercamos al Malecón 2000. Este paseo ribereño es el punto de reunión para ir de compras, comer, pasear o sencillamente reunirse para pasar el rato. Es uno de los proyectos urbanísticos más ambiciosos de Sudamérica y está formado por varios estanques, zonas de recreo, esculturas y jardines, y goza de bellas vistas del río.

Desde su extremo meridional en el mercado Sur hasta el cerro de Santa Ana y Las Peñas al norte, el malecón se extiende a lo largo de 2,5 km junto al caudaloso río Guayas. En un recinto público cerrado y vigilado que alberga restaurantes, un museo, un espacio para eventos culturales, un cine IMAX y un centro comercial.

Malecón 2000 en Guayaquil

En el extremo meridional del malecón se erige el interesante mercado Sur, conocido también como el Palacio de Cristal. Cuando se construyó este mercado cubierto de diseño belga, en 1907, era el mayor de la ciudad. Actualmente acoge exposiciones artísticas y comerciales.

Al norte del mercado Sur está el monumento a Olmedo, que rinde homenaje al poeta y presidente del primer territorio ecuatoriano independiente.

En el punto donde la calle 10 de Agosto desemboca en el malecón se encuentra la famosa torre del reloj de estilo mudéjar, que data originalmente de 1770 pero que ha sido reconstruida varias veces. Tiene una altura de 23 metros, y el visitante puede ascender la estrecha escalera de caracol que hay en su interior.

Frente a la torre, se erige el Palacio Municipal, un edificio gris de rica ornamentación separado del sobrio Palacio de Gobierno, por un pequeño pero agradable paseo peatonal. Cerca se encuentra el Museo Nahim Isaias que exhibe una excelente colección de esculturas, pinturas y piezas de la época virreinal.

Siguiendo hacia el norte se llega a la famosa estatua de la Rotonda uno de los monumentos más impresionantes de Guayaquil. Está flanqueado de pequeñas fuentes, y representa la histórica reunión que celebraron aquí Bolívar y San Martín.

Desde el malecón se ven dos barrios históricos: Las Peñas y cerro Santa Ana. Se han remodelado para convertirse en una versión idealizada de una pintoresca aldea sudamericana, con casas pintadas de vivos colore y callejones empedrados. Se encuentran pequeños e informales restaurantes familiares. Para subir al cerro Santa Anase pueden subir los 444 escalones.

Cerro Santa Ana en Guayaquil

Como nos apetece llegar a Cuenca a buena hora, nos vamos a la estación de buses en taxi que nos cobra 4 $.

Al momento sale un bus que en 3 horas nos lleva a Cuenca. Cuesta 8,25 $ por persona pero es de lujo. Especificamos que queremos pasar por el parque ya que aparte de que así lo vemos, acortamos el viaje 1 hora. El parque está a más de 4000 metros de altitud, con lo que en un trayecto relativamente corto pasamos de muy poca altitud a mucha.

Pasamos por el PN Cajas que está a solo 30 km de Cuenca. Abarca 2854 km cuadrados de páramo con centenares de gélidos lagos que brillan como joyas entre un paisaje duro e inhóspito.

Los ríos de esta zona, sumamente húmeda y neblinosa alimentan la ciudad de Cuenca. Son de especial importancia los bosquecillos de polylepis, que crecen en hondonadas resguardadas y depresiones naturales. Se trata de los arboles que crecen a mayor altitud del mundo, y pasear por uno de esos densos bosques enanos es como entrar en un cuento de hadas. Justo estos días sale en los periódicos que han instalado en el parque 20 cámaras para controlar los hábitos de los animales que hay en el parque. Se han grabado leopardos y otros animales que de otra manera no se hubiese sabido que estaban aquí.

Cogemos un taxi por 4 $ que nos lleva al hotel El Cafecito. Nos enseñan las habitaciones que cuestan 30 $ la triple con baño dentro y nos la quedamos. Tiene un jardín agradable y una zona de restaurante muy acogedor.

Ya con habitación reservada nos vamos a explorar Cuenca. Tiene 417.000 habitantes y tiene una altitud de 2530 metros.

El centro histórico de Cuenca, del siglo XVI, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, es un lugar que permanece olvidado por el tiempo, donde las monjas se apresuran por las calles empedradas, los niños con su uniforme de la escuela y las personas que espían todo lo que pasa por la calle.

Además de su característico horizonte urbano de grandes cúpulas y altas torres, Cuenca es famosa por su barranco, a lo largo de la calle Larga, donde las casas colgantes de los siglos XVIII y XIX parecen cernirse sobre el pedregoso río Tomebamba (valle del Sol). Los españoles se encontraron con las ruinas de una ciudad inca pero la desmantelaron rápidamente para sus construcciones. Antes de los incas, los indígenas cañaríes habían vivido en la zona durante cerca de 3000 años, y también tenían aquí su ciudad, llamada Quanpondelig (llanura tan grande como el cielo). No queda casi nada de estas ciudades prehispánicas.

Iglesia de Santo Domingo en Cuenca

Para cenar nos vamos a una pizzería que hay al lado del hotel en la calle de arriba, todo muy bueno, ya que pedimos antipastos, pizza y cerveza y es como si estuviésemos en España, la misma calidad y el mismo ambiente, ya que estamos rodeados de extranjeros.

Día 3

CUENCA

Desayunamos en nuestro hotel y nos vamos al Museo Pumapungo que es el más importante de Cuenca, ya que tiene toda una planta de animados dioramas que muestran los trajes tradicionales de los distintos pueblos indígenas ecuatorianos, incluidos los afroecuatorianos de la provincia de Esmeraldas; los montubios, los habitantes de las tierras bajas occidentales; varios grupos étnicos de la selva pluvial y todos los grandes grupos de la sierra. Se ven también cabezas reducidas o tzantza de los indios shuar (jibaros), del oriente meridional. Cuando ya has visitado todo esto, aún te queda la visita al Museo de Numismática donde se ve toda la historia de la moneda y los billetes de Ecuador.

Ruinas de Tomebamba desde el Museo en Cuenca

Hay también un parque arqueológico detrás del museo donde se puede pasear por las extensas ruinas que se atribuyen a la antigua ciudad inca de Tomebamba.

Hay un pequeño aviario con guacamayos de varios colores, loros de muchas variedades, águilas, etc. Hay ejemplos de todos los cultivos de la antigua cultura cañarí, con las plantas curativas, alimenticias, decorativas etc.

Loro verde muy simpático

En el museo hay unas maquetas de cómo era la ciudad para que te hagas una idea porque quedan muy pocas ruinas y no te haces a la idea de cómo podía ser.

Guacas juguetones

La visita nos ocupa bastante tiempo porque hay mucho que ver, con lo que después ya solo queda buscar algún lugar para comer. Vamos a un restaurante que no tienen ni carta ya que acaban de abrir, pero comemos bien por 10 $ los tres.

A la tarde nos vamos a pasear por Cuenca que al ser sábado por la tarde está muy animado con gente paseando como nosotros.

Hay muchas iglesias, casi todas las plazas, y hay bastantes, tienen su iglesia. En la plazoleta del Carmen, está la Iglesia del Carmen de la Asunción, que todavía tiene un convento de clausura ya que vemos un torno donde la gente hace sus encargos de pastas y de bebidas que elaboran y al momento el torno se mueve con los productos. Fuera hay un bonito mercado de flores.

La plaza mayor de la ciudad, llamada Parque Calderón, está dominada por la catedral de la Inmaculada Concepción, también conocida como la Catedral nueva, cuya construcción se inició en 1885. Sus gigantescas cúpulas de tejas de color azul cielo son visibles desde cualquier punto de la ciudad, aunque los campanarios parecen algo achaparrados debido a un error de diseño, el edificio no hubiese soportado la altura prevista.

Cúpulas de la Catedral de Cuenca

A la derecha está la oficina de turismo donde nos informan muy bien sobre lo que hacer en Cuenca y alrededores.

Al otro lado del parque se alza la encalada catedral vieja también conocida como el Sagrario. Se empezó a construir en 1557, fecha de la fundación de Cuenca, y en 1739 la expedición de La Condomine utilizó sus torres como punto de triangulación para medir la forma de la tierra. Ahora está desacralizado y sirve de museo religioso y sala de recitales.

Nos acercamos a la plaza de San Sebastián que es el límite con el Cuenca Histórico y está dominada por la iglesia de San Sebastián. En 1739, cuando la plaza servía de coso taurino, una turba de cuencanos atacó a un miembro de la expedición de La Condomine porque había tenido amores con una mujer local.

Catedral vieja de Cuenca, ahora es un Museo

Todo Cuenca está lleno de antiguos edificios con soportales y balcones de madera, algunos mejor restaurados que otros,¡ pero que dan fe de la riqueza de Cuenca en la época virreinal.

Para cenar vemos un restaurante con un menú por 2,8 $ que nos da una sopita, unos canalones de atún, jugo y postre de turrón de fruta. ¿¿ Quién da más???? Todo muy rico.

En Cuenca las mujeres o cholas cuencanas, son fieles a su traje típico. Las faldas de las cholas, llamadas polleras, llegan hasta debajo de la rodilla y su característico dobladillo bordado identifica la comunidad de procedencia de la mujer. Aunque las polleras más bonitas pueden costar centenares de $, la prenda femenina más valiosa es el paño, un chal de paño fino con flecos llamado macana y elaborado con una técnica llamada ikat, cuyo diseño se obtiene por el contraste entre las partes teñidas y no teñidas. Para los cuencanos, el sombrero de las cholas también de paja toquilla, endurecido con pintura blanca y adornada con una cinta negra, es tan familiar como el panamá. Dos largas trenzas y grandes zarcillos de metal completan el atuendo.

Día 4

GUALACEO – CHORDELEG – SIG SIG

Nos vamos a la terminal de buses con un bus que por 0,25 centavos de $ nos lleva. Cuando llegamos al momento ya hay un bus que va a Gualaceo por 60 centavos. Tardamos unos 45 minutos en llegar. Según la guía hay un mercado de artesanías, pero lo que realmente vemos es un mercado de fruta y verdura muy colorista y lleno de gente que va a comprar para toda la semana. Hay otro mercado que vende animales, desde perritos, gansos, patos, pollos, gallinas o cuyes. El precio del cuy no es barato pues vivo cuesta 4 $. Un poco más adelante ya los están haciendo a la brasa y el precio oscila entre los 6 y los 10 $. Un pollo asado cuesta 12 $. La vida está cara aquí en Ecuador.

Mercado de Gualaceo

De aquí cogemos otro bus hasta Chordeleg que nos cuesta 25 centavos, ya que está muy cerca a unos 6 km. Este pueblo es famoso por la filigrana en oro y plata ya desde antes de los incas y por los textiles. Hay muchas tiendas alrededor de la plaza central del pueblo, con calidades distintas pero los precios no son baratos. Los mejores trabajos nos dicen que están hechos en Italia, con lo que pierde la gracia. También venden los sombreros típicos Panamá hechos de paja toquilla, a partir de 15 $. También se producen tallas de madera, cerámicas y textiles.

En el puesto de hierbas medicinales

De allí cogemos un bus por 50 céntimos que nos lleva a Sig Sig después de 18 km de una carretera panorámica. Es una aldea indígena de la era virreinal, más conocido por sus sombreros Panamá. A las afueras del pueblo, en el antiguo hospital, una cooperativa de mujeres llamada Asociación de Toquilleras María Auxiliadora vende sombreros baratos, aunque unas amigas argentinas pagan 20 $ por su sombrero!!! Es famoso por los edificios republicanos que suponemos que son unas casas con balcones de madera pero que están en un estado un poco ruinoso.

La mujeres son las que venden…¡¡cómo no!!

Cerca hay unas ruinas Paleo-Indias representadas por La cueva Negra de Chobshi, que se cree que fue habitada hace 11.000 años. Cerca están las ruinas del Castillo del Cacique Duma y Shabalula.

Antes de llegar a la terminal ya hay un bus que nos ve acercarnos y que nos espera para volver a Cuenca. Cuesta 1,25 $ el trayecto.

Al llegar cogemos un bus que creemos que nos deja cerca del hotel. Como no lo sabemos cuando pasa cerca no nos bajamos, pensando que habría otra parada más cerca y craso error ya que llega a un mall que está a casi una hora de distancia que se llama Mall del Rio. Está abarrotado de gente, ya que Cuenca está todo cerrado y la gente se va para poder pasear, comprar o ir al cine.

Parece que hay una prohibición de vender alcohol los domingos porque vemos un cartel en el que lo pone en Chordeleg y cuando pedimos si nos pueden servir una nos dicen que no.

Cuando conseguimos llegar al hotel después de una excursión importante, por el extrarradio de Cuenca, buscamos un restaurante para cenar con nuestros nuevos amigos Juan y Laura pero nos tenemos que quedar en el hotel La Cigale que está justo al lado de nuestro hotel. Como es el único abierto está lleno de extranjeros con la música a todo volumen, y aquí no hay problema con la venta de cervezas. Cenamos muy bien y el precio no está mal ya que salimos a 7 $ por persona y es de mucha calidad todo lo que pedimos.

Día 5

CUENCA – ALAUSÍ

Por la mañana, después de desayunar, nos vamos a visitar el Museo de las Culturas Aborígenes que según la guía es el mejor de Cuenca por la colección que contiene de más de 15.000 piezas, pero solo hay expuestas 5000. Se pueden ver más de 20 culturas ecuatorianas prehispánicas que se remontan a 15.000 años. El precio son 1,5 $ los estudiantes y 2 $ la general. Está muy bien puesto todo, con informaciones de cada cultura.

Pieza del Museo (Hay 5000)

No teníamos ni idea de la diversidad que hay y las cerámicas son muy bonitas.

Otra pieza

Cuando terminamos la visita, vamos a por las mochilas y cogemos un taxi por 2 $ que nos lleve a la terminal. Nada más llegar ya hay un bus que va a salir hacia Alausí. Nos cuesta 5 $ y tarda 4,5 horas en llegar. La carretera sube a 3323 metros, pero hay poca visibilidad ya que hay mucha niebla y llueve bastante.

Prácticamente colgado del desfiladero del río Chanchán y con una estatua gigante de san Pedro presidiendo el lugar, Alausí es la parada del tren antes de descender hacia la famosa Nariz del Diablo. Alausí es muy pintoresco, sobre todo en las inmediaciones de la estación de trenes y por sus callejuelas adoquinadas, con viejas casas de adobe con balcones de madera. Hoy día no es más que un apeadero, con muy pocos turistas. Cogemos el hotel Panamericano que las habitaciones con baño son limpias y luminosas, pero las que no lo tienen son un poco cutres. Cuesta 20 $ la doble.

El hotel Europa está mejor, son más bonitas las habitaciones pero cuestan 30 $ y no hay manera de rebajarlas.

Está muy muerto el pueblo, con muy pocos turistas, las tiendas a las 6 y media ya están cerrando. En nuestro hotel, en teoría hay wifi, pero no conseguimos conectarnos.

En un restaurante nos preparan algo de cena, pero no hay mucho donde escoger.

Día 6

NARIZ DEL DIABLO – RIOBAMBA – AMBATO – BAÑOS

A las 8 de la mañana sale el primer tren turístico a Nariz del Diablo, luego hay uno a las 11 de la mañana y otro a las 3 de la tarde. Cuesta 20 $ por persona y actualmente solo se puede hacer el trayecto de Alausí – Nariz del Diablo – Alausí. No hemos reservado pero hay tan pocos turistas que no hace falta. En total en este turno somos 23 personas en el vagón. Se tiene uno que sentar en el lado derecho del vagón porque casi todo el tiempo las mejores vistas son de ese lado. Ver web del tren

Nos comenta el guía que nos va explicando cosas sobre la construcción de este tren, que los ecuatorianos que empezaron a construirlo no sobrevivían a las duras condiciones de trabajo y les atacaban la malaria, dengue, y otras enfermedades para las cuales no eran inmunes.

Como el presidente Alfaro quería a toda costa construir el tren trajeron a 4000 esclavos jamaicanos de Estados Unidos para que hicieran el trabajo. Todo se hacía a base de dinamita y no se tenían en cuenta la seguridad de los trabajadores, ya que en el momento que ponían las cargas de dinamita, se hacían explotar sin esperar las dos horas que tardaban los trabajadores en bajar de la montaña, con lo cual había una gran mortandad. Preferían pagar la indemnización por la muerte que era 2 $ ya que era más barato. Más tarde se hacían cuadrillas de trabajadores y el que sobrevivía en la cuadrilla era el que cobraba todo el salario.

Era una merienda de negros, literal, muy fuerte.

Nosotros en Sibambe

Al cabo de 3 cuartos de hora ya hemos llegado a la nariz del diablo y nos dejan bajar del vagón unos minutos para hacer las fotos de rigor. Inmediatamente después volvemos un trozo hasta el apeadero de Sibambe donde nos están esperando un grupo folklórico para bailarnos unas canciones. Aquí también con el tiquet que hemos comprado tenemos derecho a una consumición de 2 $. Nos toca un sándwich de jamón y queso con un poco de ensalada que podemos aliñar con aceite de oliva (todo un lujo) y un café de máquina!!!!!! Aquí tenemos toda una hora para este pequeño almuerzo, para que podamos comprar souvenirs, y visitar el pequeño museo llamado Cóndor Puñunaque han inagurado en noviembre del 2011 gracias a la ayuda de Canadá donde explican a que se dedican los indígenas de esta zona, como hacen los productos que hay a la venta etc.

Nariz del Diablo

En media hora ya estamos de vuelta en Alausí ya que son 12 km de nada. Hemos tenido suerte ya que está poniéndose todo neblinoso y tapando todas las vistas.

Este tren sale de martes a domingo. Nos informan de que a final de año habrán restaurado toda la línea y se podrá ir de Quito a Guayaquil. En sus inicios era una gran mejora ya que por tierra se tardaba de dos a tres semanas para hacer el trayecto y con el ferrocarril se acortó a dos días, el primero se llegaba de Quito a Riobamba y el segundo llegaban a Guayaquil. El trayecto que hemos hecho es el más espectacular ya que baja de 3350 metros a 2585 metros, con un desnivel de 765 de roca maciza. En 1902 los ingenieros ferroviarios idearon un inteligente modo de salvar este enorme obstáculo, tallando una ruta en zigzag por la ladera de la montaña. El tren se desplaza un poco al norte, cambia de vía, avanza hacia el sur y cambia de vía, subiendo y bajando así por la Nariz del Diablo. Con buena visibilidad se ve el Chimborazo, el Altar, la laguna de Colta y las comunidades indígenas de la región.

Antes se podía ir sobre el tejado pero como en 2007 murieron dos turistas en el autoferro, lo han prohibido. El presidente Correa dio como prioridad de desarrollo turístico el ferrocarril Transandino. Se está llevando una gran tarea de restauración de las vías, incluido el desvío a Cuenca y más de 45 estaciones. Hay polémica sobre el impacto ambiental por la tala de árboles para las traviesas, pero realmente va muy avanzado.

A las 11 y media cogemos un bus a Riobamba que sale cada media hora de enfrente de nuestro hotel. En casi dos horas llegamos por un precio de 1,9 $. Inmediatamente cogemos a la llegada un bus a Ambato por 1,25 $ que nos deja al cabo de 50 minutos. Cruzamos la carretera y ya hay otro que nos lleva a Baños por 0,8 $. Durante todo el camino desde Alausí vemos la vía del tren preparada ya con las piedras de alrededor etc. Lo que no sabemos es que pasará ya que pasa por medio de la carretera Panamericana en algunos trocitos.

Baños es una ciudad dedicada a los deportes de aventura desde rafting, puenting, jumping, bicicleta, baños en aguas termales, equitación, excursionismo, circuitos por la jungla, escalada y todo lo que pueda ocurrirse a alguien para disparar la adrenalina a 100. Aparte es muy barato, ya que hacer un jumping cuesta sólo 15 $. Es un pueblo de unos 14000 habitantes pero muy agradable para pasear, lleno de buenos restaurantes y bares para pasar el rato.

Cuando llegamos a la terminal de autobuses, bajamos andando por la calle Maldonado hacia el centro del pueblo y pasamos por delante de un hotel que no sale en la guía pero que tiene buena pinta. Se llama Casa Blanca y las habitaciones están muy limpias, bien decoradas, con baño y televisión por cable y wifi. Nos lo deja por 20 $.

Solucionado el tema alojamiento, bajamos al Parque Central, donde está la oficina de turismo, que muy amablemente nos informan de que se puede hacer por los alrededores de la ciudad.

Justo al lado hay un restaurante donde comemos unos platos muy buenos y elaborados, aunque no baratos.

Seguimos nuestro paseo visitando la Basílica de Nuestra Señora de Agua Santa. Es muy curiosa porque dentro de la iglesia hay cuadros de todos los milagros que ha hecho esta virgen. En la LP ya lo explica, son muy divertidos.

Tiene 4 balnearios municipales que abren muy prontito por la mañana hasta las 5 de la tarde, cierran 1 hora para limpiar y a las 6 abren hasta las 11 de la noche.

Otra cosa que se puede hacer es alquilar un quad o un quadron que es un vehículo parecido a un boogui. Hay un volcán llamado Tungurahua (garganta de fuego en quechua) de 5016 metros, pero no hemos tenido suerte, está permanentemente tapado con nubes y no lo vemos.

Día 7

BAÑOS – RUTA DE LAS CASCADAS – LATACUNGA

Las agencias ofrecen un tour que se puede hacer en 3 horarios diferentes, el primero a las 10:30, el segundo a las 13:30 y el último a las 15:30. Le llaman el tour de las cascadas y cuesta 5 $ en un autobús de dos pisos descubierto, como los que van por las ciudades europeas para visitarlas. Al principio te llevan por Baños y te van explicando un poco de la ciudad, después se va a una garganta estrechísima donde se puede subir a una tarabita, que es una cesta donde te subes y te desplazan por unos cables para que veas el cañón. Cuesta 1 $ ida y vuelta.

Manto de la Novia

De allí se pasa por la hidroeléctrica Agoyan y la cascada Agoyan. La siguiente cascada se llama Manto de la novia. Subimos todos a la tarabita que cuesta 1,5 $ ida y vuelta y atraviesa los 500 metros de la garganta, alcanzando unos 100 metros de altura. Pasamos un puente colgante y tenemos que pagar 0,5 $ por pasar por la casa de un señor y llegar a la cascada.

Terabita para ir al manto de la Novia

Solo 1 año atrás hubo una tormenta muy fuerte que destruyó el hotel que había a los pies de la cascada y ahora hay dos caídas de agua en vez de una que había anteriormente. Pasamos una serie de túneles que casi tocamos con la cabeza al ir arriba en el bus y llegamos a la cascada San Jorge que la vemos desde el bus. Pasamos el pueblo de Río Verde y llegamos a la última cascada que se llama Pailón del Diablo. Aquí se paga 2 $ por entrar, se camina durante unos 15 minutos y se llega a la cascada. Se puede ver desde un puente colgante que hay, o se puede subir para verlas más de cerca. Los primeros tramos de la subida desde aquí son fáciles, pero se llega a un sitio donde tienes que entrar entre la roca de la montaña reptando como una serpiente, teniendo que tener mucho cuidado porque hay rocas con unos salientes que si no tienes cuidado te puedes dar un coscorrón como es el caso.

Pailon del Diablo

Hay varios miradores pero el último trozo te mojas por completo y puedes pasar por detrás de la cascada, solo para muy lanzados.

La bajada es más suave y a la salida hay un señor que hace unos zumos de naranja por 1 $ que se agradece mucho. Hay muchos puestos de artesanía por si se desea comprar algo.

Puente Colgante

Volvemos a Baños, comemos un menú por 2 $ que no está mal y cogemos el equipaje para ir a la estación de buses. Como no podía ser de otra manera, ya hay un bus que está empezando a circular donde nos suben casi a rastras que nos va a llevar a nuestro siguiente destino que es Latacunga. Cuesta 2 $. Llegamos en unas 2 horas, pero como nos deja en las afueras cogemos un taxi por 1 $ que nos lleva al centro de la ciudad. Unos amigos nos habían recomendado el hotel Tiana a 100 metros del parque Vicente León. Vamos a ver si hay suerte pero nos dicen que sólo quedan dormitorios compartidos y no nos apetece a nuestra edad ir a un dormitorio con chicos/as de 20 años con el baño también compartido. En el mismo hotel nos recomiendan uno que está muy cerca que también sale en la LP que se llama Hotel Central. Nos acercamos y si que tienen habitación. Está muy limpio, no es muy moderno, pero son muy atentos y el precio es ideal, ya que cuesta 8 $ por persona, con tele y baño dentro.

Salimos a pasear por la ciudad aunque como son las 5 y mucho, casi todo lo visitable está cerrado. En el mismo parque Vicente León está el Ayuntamiento, de la época republicana, con un par de cóndores de piedra en lo alto. En la parte sur se encuentra la catedral virreinal. Al oeste un edificio porticado alberga las oficinas del Gobierno provincial.

Teóricamente se ve el volcán Cotopaxi (5897 metros), pero seguimos con la mala suerte y está totalmente cubierto de nubes.

Subiendo por la calle Orellana se llega a la casa de los Marqueses de Miraflores, una mansión de la época virreinal que alberga un museo arqueológico y religioso sobre las fiestas de la Mamá Negra. En estas fiestas hay una combinación de rituales católicos, prehispánicos y cultura contemporánea que llenan las calles de la ciudad de vestidos tradicionales y baile.

A la cabeza va la Virgen de las Mercedes, protectora de la ciudad contra las erupciones volcánicas. La gente del lugar cree que esta reliquia ha salvado Latacunga de la ira del volcán Cotopaxi muchas veces, por lo que le tienen gran fe. No se acuerdan que en 1742 y en 1768 destruyó casi toda la ciudad. Se volvió a construir pero en 1877 hubo otra erupción que trajo el caos por 3ª vez.

Las fiestas consisten en unos brujos (huacos) que ejecutan una limpieza ritual soplando humo y aguardiente sobre los espectadores. También se ven a los ashangueros, los hombres que llevan ashangas: cerdos enteros asados, abiertos en dos y rodeados de docenas de cuys, pollos, botellas de licor y cigarrillos. En este gran teatro callejero hay quien interpreta a los yumbos (indígenas del oriente) loeros (esclavos africanos), camisonas (mujeres de la época virreinal) y muchos otros personajes. La que da nombre a la fiesta “Mamá negra” es representada por un hombre del lugar vestido de mujer negra, que según la leyenda un cura no aportó demasiada comida y bebida a la fiesta y por la noche se le apareció una mujer negra reprochándoselo. Lo aterrorizó y para contentarla introdujeron este personaje a la fiesta.

Nos encontramos con nuestros amigos Juan y Laura que también se han cambiado de hotel al nuestro porque no tenían habitación para esa noche en el hotel Tiana. Nos vamos a cenar a una pizzería subiendo por la calle Orellana y cuando llegas un poco más arriba de la casa de los Marqueses de Miraflores giras a la izquierda y allí está. El trozo de pizza cuesta 1,5 $ y te deja lleno. También las cervezas valen a 1,5$ con lo cual cenamos por menos de nada todos y en muy buena compañía.

Día 8

LATACUNGA – SAQUISILI – ZUMBAHUA – QUILOTOA

Hoy desayunamos es nuestro hotel por 2’5 $, mientras la dueña del hotel nos informa de toda su vida. Nos asombra saber que es palestina y que hace 46 años que llegó a Ecuador. Su hermana se enamoró de un ecuatoriano, ella vino a verla y también a los 8 meses ya se  casaba con otro a los 16 años. Montaron el hotel y le va bien ya que tiene clientes fieles que vienen para las fiestas de carnaval y las fiestas de Latacunga.

Cogemos un bus que nos lleve al mercado de Saquisili que es famoso en toda la región. Hace unos años era muy autentico y nadie lo conocía pero ahora todo el mundo sabe que el jueves hay que ir al mercado. Nos cuesta 0,3 $ ya que está muy cerca, unos veinte minutos.

 Tiene unos 10.000 habitantes y su mercado tiene un gran abanico de objetos típicos de la sierra. Se compone de ocho plazas, que son como unos bulliciosos grandes almacenes al aire libre al que acuden toda clase de indígenas; hay una zona de venta de cuys, otra de esteras, angarillas, ropa, ollas, comida etc.

El mercado de animales empieza antes de hacerse de día, con lo que a las 10, que es cuando nosotros llegamos está casi todo recogido, aún vemos cerdos, gallinas, llamas, pero poco más.

Cuando ya hemos hecho un montón de fotos y hemos visto casi todo, cogemos otro bus que nos lleve a Latacunga a buscar las mochilas. Cogemos un taxi que nos lleve a la estación de buses, donde preguntamos para Quilotoa y nos dicen que si que nos lleva. Nos cuesta 2 $.

En un momento determinado nos dicen que nos tenemos que bajar y coger un camión que nos dejará en Quilotoa. Estamos en Zumbahua. Hemos pasado por unos paisajes espectaculares, la pena es la niebla y la lluvia. Tiene una altitud de 3800 metros y solo 3000 habitantes. El camión nos cuesta 1,5 $. Al llegar miramos unos cuantos hostales pero son muy básicos y al final nos vamos al  Alpaca Quilotoa que nos lo deja a 18$ por persona con cena y desayuno. Está muy bien con unos edredones de plumas, y todo con mucho gusto. Cada habitación tiene una chimenea de leña que sobre las 7 de la tarde la encienden porque hace mucha humedad y frio.

Laguna de Quilotoa

Salimos cuando ya estamos aposentados a ver la laguna Quilotoa que está a 200 metros del hotel. Tenemos suerte porque la vemos por completo. Es muy bonita y nos recuerda algunas de Rapa Nui o Yemen que hemos visto en otros viajes. Desde el borde del cráter se tiene una panorámica fascinante del lago que se extiende como un espejo verde, 400 metros por debajo y de las cumbres nevadas del Cotopaxi y el Iliniza Sur a lo lejos. Evidentemente nosotros no vemos ninguna de ellas. La profundidad de la laguna es de unos 250 metros. A buen paso se puede recorrer la pista del borde del cráter en 6 horas. Otro camino desciende hasta el agua donde se pueden alquilar canoas y kayaks por 5$ la hora. El agua de la laguna es alcalina y no potable.

Hay que pagar 2 $ para entrar al pueblo como extranjero. Tiene 150 habitantes y está a una altura de 3914 metros.

Viajeros en la Laguna de Quilotoa

Volvemos al hotel donde nos dan un cafetito caliente para entrar en calor. No hay wifi, con lo que leemos y nos preparamos los siguientes pasos del viaje.

A las 7 nos llaman para la cena. Nos dan una sopita y un plato de carne  con arroz. Si quieres, puedes comprar cerveza que va aparte por 2 $.

Subimos a la habitación y está congelada como era de esperar, aunque cuando te metes en la cama al momento se entra en calor por la ropa de cama que es buena.

Día 9 

LAGUNA DE QUILOTOA – LATACUNGA – QUITO

Después del frugal desayuno continental volvemos a ver la Laguna otra vez. Está más tapada que el día anterior y comienza a llover otra vez. Esto nos hace decidirnos a seguir camino ya que la opción de ir andando y hacer el circuito de Quilotoa que nuestros amigos Laura y Juan nos han  recomendado no la vemos factible. El clima no acompaña, con lo que recogemos las cosas y nos vamos a coger un camión que nos lleva a Zumbahua por 5 $ los tres. Nosotros vamos en la parte de atrás del camión al aire libre, y dentro de la cabina los del pueblo, todavía hay clases.

Cuando llegamos a Zumbahua, preguntamos y nos dice un tipo que nos lleva a Latacunga por 20 $, ya que falta una hora para que llegue el bus. Para hacer tiempo hasta que llegue el bus nos vamos a tomar un café, lo acaban de servir cuando ya está el bus allí. Igualmente alguien les dice que nos estábamos tomando un café y se esperan unos momentos para que lo tomemos. Nos cuesta 2 $, como a la ida.

Nos dejan en la panamericana y nos dicen que un bus que hay allí mismo nos llevará a Quito. Nos subimos pero no hay asientos y pretenden que una señora se levante para que nos sentemos nosotros. No nos gusta nada y exigimos que paren inmediatamente que nos bajamos. La señora se queja con razón.

Al momento pasa otro bus que si tiene asientos y en poco más de 2 horas ya estamos en la estación sur de Quito. Nos cuesta 1,5 $. Vamos a la oficina de turismo que hay en la misma estación Quitumbe, y nos dan un mapa de Quito y nos dice como llegar al hotel que hemos decidido con transporte público. Cuesta 0,25 $ el billete. Cogemos el trolebús hasta el parque Alameda. Está de la estación de buses a unos 10 km. Quito es como un chorizo (según dicen ellos) y tiene 80 km de largo. Tardamos más de una hora, y casi sin parar, ya que el transporte público tiene un carril especial para ellos y es muy rápido dentro de lo que cabe.

El hotel está en la parte nueva pero tocando a la parte vieja. Está a un km de la parada Alameda en la calle Colombia. Se llama l’Auberge Inn. Es de unos suizos y es muy seguro. Un refugio de mochileros muy agradable con mesa de billar, juegos de mesa, ordenadores con internet y una agencia de viajes dentro. Cuesta 24 $ la doble con baño dentro de la habitación. Tienen otras habitaciones con baño compartido y dormitorios de varias camas, separadas por sexo que son más baratos.

Dejamos las cosas y nos lanzamos a ver el centro histórico de Quito. Es un lugar fantástico para pasear. Erigidos entre los siglos XVI y XVIII, los conventos, iglesias, capillas y monasterios de Quito son testigos de la historia de la capital. Es un barrio bullicioso lleno de vendedores, policías en cada esquina, gente que preconiza el fin del mundo etc.

El corazón del casco antiguo es la Plaza Grande, llamada Plaza de la Independencia. Es un espacio rodeado de palmeras y edificios históricos. El edificio blanco y austero del lado noroeste de la plaza, con la super bandera nacional ondeando en lo alto es el Palacio del Gobierno. Solo se puede entrar apuntándose a una visita guiada, que permite contemplar entre otras cosas el colorido mosaico que representa el descenso de Francisco de Orellana por el Amazonas. También se pueden visitar algunos salones. Los lunes a las 11 tiene lugar el cambio de guardia en la plaza, y si se está en Quito es un espectáculo que reúne a cientos de personas y vale la pena.

La catedral la encontramos cerrada, parece que solo abre a las 7 de la mañana para misa y luego todo el día cerrada. Al otro lado está el Palacio Arzobispal que tiene un montón de tiendecitas y restaurantes. Queremos entrar en el Centro Cultural Metropolitano que alberga varias exposiciones temporales, terrazas en  la azotea y un agradable café, pero está cerrado aunque la guía pone que cierra a las 5, en realidad cierra a las 4 de la tarde.

Interior de la Iglesia de la Merced

Dos manzanas al norte nos encontramos con la iglesia de la Merced construida entre 1700 y 1742, su campanario de 47 metros es el más alto del Quito virreinal. Cuenta la leyenda que esta torre, la única parte de la iglesia que no fue bendecida, está poseída por el diablo. Solo un campanero llamado Ceferino tuvo la valentía suficiente para hacer frente al demonio; nadie ha vuelto a subir al campanario desde su muerte en 1810, lo que explica que el reloj esté parado y que nunca se tañan las campanas.

Llegamos a la plaza de San Francisco la cual constituye una de las imágenes más hermosas de Ecuador: una extensa plaza empedrada recortada contra el montañoso telón de fondo del volcán Pichincha y los largos muros encalados y los campanarios gemelos de la iglesia más antigua de Ecuador. La construcción del monasterio de San Francisco, la estructura virreinal más grande de la ciudad, se inició tan solo semanas después de la fundación de Quito en 1534, pero tardó 70 años en completarse. Fue fundado por el misionero franciscano Joedco Ricke, que también fue el primero en sembrar trigo en Ecuador. Se le rinde homenaje con una estatua frente a la iglesia. El altar mayor es un magnífico ejemplo de talla barroca, mientras que gran parte del techo muestra una clara influencia mudéjar. A la derecha está la entrada al Museo Franciscano pero no entramos.

Llama en Quilotoa

Muy cerca nos encontramos la iglesia de la Compañía de Jesús, la más ornamentada de Ecuador, cuyas cúpulas verdes y doradas son visibles desde la distancia. La construcción de esta iglesia se inició en 1605 y tardó 160 años en completarse. Hay circuitos guiados gratuitos, que resaltan los elementos únicos del templo, como los de estilo mudéjar, su perfecta simetría hasta en las escaleras, su simbolismo (paredes rojo vivo en recuerdo a la sangre de Cristo) y su sincretismo (plantas ecuatorianas y caras indígenas ocultas entre los pilares). Cuesta 1,5 $ con carnet de estudiante y 3 la general para extranjeros.

A manzana y media está la Casa del Sucre, la antigua residencia del mariscal Antonio José de Sucre, prócer de la independencia ecuatoriana. De allí vamos a la Ronda, una de las zonas de la ciudad vieja que ha sido restaurada más recientemente. Esta estrecha vía, está bordeada de pintorescos edificios del siglo XVI, con letreros informando sobre la historia de la calle y los artistas, escritores y políticos que residieron en ella. Se anima las noches de viernes y sábado.

De aquí salimos a la plaza de Santo Domingo, donde se encuentra la iglesia de Santo Domingo.

Hay una estatua del Mariscal Sucre, señalando la Cima de la Libertad, el lugar donde ganó la batalla del Pichincha, decisiva para obtener la independencia, el 24 de mayo de 1822.

A lo lejos se ve el Panecillo. Está coronada por una enorme estatua de la Virgen de Quito, con una corona de estrellas, alas de ángel y un dragón encadenado en la cima del mundo. En teoría hay buenas vistas de los volcanes pero está todo tapado.

Como se va haciendo de noche vamos volviendo, ya que llegamos a la plaza del teatro y el ambiente es muy sórdido. Nos recomiendan no estar por esa zona cuando anochece porque hay mucha delincuencia. Cogemos un trolebús que nos devuelve a nuestro hotel.

Día 10

QUITO – OTAVALO –QUITO

El desayuno en el hotel es un buffet libre por 3,5$ donde tienes fruta fresca, zumos, tostadas, huevos fritos, mantequilla, mermelada, pastas etc. Nos ponemos las botas y con el estomago lleno nos vamos a hacer todo lo que hemos previsto.

Hoy es sábado y hay mercado en Otavalo, aunque primero vamos al aeropuerto para comprar los billetes de avión a las Galápagos. Como hay 3 compañías que vuelan y solo sabemos el precio de TAME que es 546 $, preguntamos en Lan y en AeroGal. En Lan nos piden 531 $ y en AeroGal nos piden 457 $ con lo que los compramos inmediatamente antes que cambie de opinión. Compramos la ida a Baltra y la vuelta desde la isla de San Cristóbal que así nos ahorramos traslados. Se puede pagar con tarjeta de crédito y no cargan ninguna comisión, o en cash que es lo que nosotros hacemos. No admiten billetes de 100 $, suponemos que por las falsificaciones, de hecho en los cajeros que hemos sacado dólares, siempre nos dan billetes de 20 $, lo cual es una suerte porque hay un problema endémico de cambio en Ecuador, nunca tiene nadie cambio, con lo que siempre estamos buscando cambio en todos sitios para no tener problemas.

Calabazas decoradas en Otavalo

Para llegar al aeropuerto desde nuestro hotel es fácil, ya que se coge el Trolebús por 0,25$ en Alameda, el C1 hasta el final que es Terminal Y. De allí y sin tener que pagar nada se coge un bus: el Q3 que te deja en la puerta del aeropuerto Mariscal Sucre. Están construyendo otro pero dicen que hasta final de año no estará en funcionamiento. Estará bastante más lejos, a unos 20 km, porque este, está en medio de la ciudad y consideran que es peligroso y por eso lo van a cambiar.

Resuelto el tema billetes de avión tenemos que ir a Otavalo. Podemos coger otra vez el mismo Q3, llegar a la terminal Y, y allí coger otro bus que nos lleve a la Terminal Carcelén que es de donde salen los buses a Otavalo. Como ya son las 10, decidimos coger un taxi para adelantar. Al preguntar nos dicen 4, 5 o 6 $. Nos parece mucho, con lo que nos alejamos un poco del aeropuerto y paramos a otro que nos dice 4$. Como no queremos perder más tiempo y estamos hablando de miserias lo cogemos.

Especias en Otavalo

La terminal de buses está lejísimos tal como nos decía el taxista y no le creíamos. Tardamos casi 20 minutos por una carretera sin apenas semáforos.

Vendedora tribal

Al llegar a la terminal ya hay un bus a Otavalo. Nos cuesta 2 $ y tardamos unas 2 horas por una carretera que están terminando de hacerla de 4 carriles, 2 por cada lado. Se nota en Ecuador que están mejorando mucho las infraestructuras porque todas las carreteras que estamos pasando están en muy buenas condiciones, todo lo contrario a Perú que las carreteras eran infernales.

Típicos sombreros Panamá

Otavalo es una ciudad de 43000 habitantes a una altura de 2550 metros sobre el nivel del mar. Sus habitantes son los indígenas más ricos y con más éxito comercial de todo Ecuador y seguramente de América, lo que los hace vivir con relativa holgura. Son característicos en los hombres, muy guapos, su poncho y su pelo largo negro trenzado. Las mujeres también visten un atuendo muy vistoso, con sus blusas blancas bordadas, sus collares de muchas vueltas imitando el oro, sus faldas negras hasta los pies, abiertas por los lados y por donde asoman otras faldas que pueden ser blancas (lo más habitual) o de cualquier otro color. Completan su atuendo con unas zapatillas negras planas que se atan a los tobillos y pulseras rojas que supongo tienen un significado en su cultura pero que desconozco. Los aretes son pequeños pero exquisitos.

Chancho

El mercado de Otavalo es el más grande de Sudamérica, y vemos a bastantes turistas en él. Hay de todo lo imaginable, textiles, cuadros, ropa como ponchos, blusas, guantes, sombreros, cinturones, calzado, decoración del hogar, hamacas, bisutería (mucha de la India), chales, etc. También, por supuesto hay comida, mercado de animales, herramientas etc. Los precios no son baratos, se aprovechan de su fama, y viene gente de todas partes. Hay una calle donde hay paraditas con recuerdos de los indios americanos como los navajos o apaches.

Ya es mala suerte porque al rato de pasear por este mercado tan ameno, cae una tromba de agua que nos pone perdiditos de agua, a pesar de llevar paraguas no nos protege lo suficiente.

Con otra climatología nos hubiésemos acercado a visitar El Lechero que es un árbol mágico situado en las afueras de Otavalo, muy famoso por sus poderes curativos. A 17 km al sur están las Lagunas de Mojanda, que fueron declaradas zona protegida en el 2002. Otra laguna famosa es la Laguna de San Pablo, que tiene unas magnificas vistas del volcán Imbabura, pero nosotros al pasar con el bus no hemos tenido suerte ya que está todo tapado.

Nos quedamos a comer en un restaurante moderno que encontramos y la verdad es que comemos muy bien, pedimos unos camarones (gambas) al ajillo con patatas fritas (como no), arroz, verduritas y bien regado por unas cervecitas. Los tres 21 $.

Regresamos a la estación de autobuses y ya hay un bus que está a punto de salir hacia Quito. Es divertido porque el encargado del bus, redistribuye a la gente en los asientos si están solos para poner juntos a las parejas o amigos que viajan juntos. Con buen humor la gente se cambia y todos tan contentos.

En 2 horas llegamos a la estación Carcelén, donde cogemos un bus que nos lleve a la estación Y, y allí un trolebús que nos lleve hasta Alameda, desde donde está ya muy cerca nuestro hotel.

Cuando hemos hecho todo esto es noche cerrada y atravesar un parque desierto en apariencia, pero que puede haber gente oculta da un poco de miedo. No hay casi nadie por las calles e impresiona, y si añades que en el trolebús un parroquiano te advierte que has de evitar la zona centro a partir de las 6 de la tarde porque somos un objetivo prioritario para los ladrones, vamos muy rápido al hotel, donde llegamos a pesar de todo sanos y salvos.

Día 11

QUITO – LA MITAD DEL MUNDO – TELEFÉRICO – QUITO HISTÓRICO

Esta mañana tenemos una grata sorpresa porque cuando salimos del hotel hay un sol brillante y cielos azules, pero el volcán Pichincha sigue tapado, no podía ser todo bueno.

Cogemos un metrobus por 0,25 $ en la Avda. América hasta el final que es la estación Ofelia. De allí cogemos otro bus que nos lleva a Mitad del mundo por 0,15 $ más. En una hora en total llegamos a nuestro destino. La entrada cuesta 2 $ por persona y no hay descuentos para estudiantes. Este lugar es famoso ya que es el lugar donde, en 1736, La Condamine realizó los cálculos que demostraron que tal línea se encontraba en esta zona.

Foto turistada de la Mitad del mundo

Los cálculos que realizó durante su expedición dieron pie a la creación del sistema métrico y demostraron que el planeta no es perfectamente esférico, sino que está ligeramente abombado en el ecuador y en los polos. A pesar del carácter turístico del monumento que marca el emplazamiento exacto del ecuador, merece su visita. En el centro de la Mitad del Mundo se alza un monumento en piedra de forma trapezoidal y 30 metros de alto coronado por una esfera de cobre. Es la pieza central del parque, que contiene una plataforma mirador y un museo etnográfico, con dioramas, exposiciones de vestimenta y fotografías. Cuesta 3 $ más pero no entramos ya que hemos visto ya unos cuantos museos.

Mitad del Mundo

Hay un montón de cafeterías, restaurantes donde nos acosan para que comamos y solo son las 10 de la mañana. Hay un gran escenario donde a partir de la 1 hay actuaciones hasta las 6 de la tarde. Poco a poco se va llenando sobre todo de familias autóctonas que van a disfrutar de este domingo soleado en un ambiente seguro y agradable.

La agencia Calima Tours que está aquí mismo organiza excursiones en coche al volcán Pululahua por 3 $ que duran una hora y otras por 8 $ que duran un poco más ya que hay un treking de hora y media. En esta agencia en la puerta hay una foto de Miguel Bosé, pesándose en un balanza que hay allí mismo, ya que las personas pesan menos en el Ecuador. Esto se debe a que en él hay una mayor fuerza centrífuga que en los polos. La diferencia sin embargo es sólo de un 0,3%. Nosotros no lo probamos porque la balanza está en libras y aún nos asustaríamos.

A pesar de todo este montaje nosotros que llevamos un GPS, lo situamos y tal como pone en la guía no estamos en el Ecuador exacto donde todos nos hacemos la típica foto con una pierna en cada lado. El verdadero 0:0:0 está en un yacimiento prehispánico, construido hace más de 1000 años llamado Catequilla.

Además de este yacimiento hay uno llamado Rumicucho unos 3,5 km al noreste de la Mitad del Mundo. Es de la cultura Quitu- cara y se cree que tiene una antigüedad alrededor del año 500 ac. Fue utilizado principalmente como lugar de ceremonias durante los equinoccios.

Preguntamos y nos dicen un bus que nos llevará directamente al teleférico, que como está bastante despejado pensamos que valdrá la pena. Nos cobran 0,4 $ por todo el trayecto.

Desde lo alto del teleférico

Hay un bus que te sube al inicio de la atracción gratuitamente. Para los extranjeros cuesta 8,5 $ y si eres estudiante extranjero tienes que estar censado en Ecuador para que te lo rebajen a 3,6 $. La única ventaja es que hacemos menos cola. Permite ascender 2,5 km por la ladera del volcán Pichincha hasta lo alto de Cruz Loma. Al final del recorrido a 4.100 metros de altitud se puede seguir una ruta de senderismo hasta la cima del Rucu Pichincha que llega a los 4680 metros y se tarda unas 3 horas. Hay un montón de chicos que suben con las bicicletas de montaña y se lanzan carretera abajo como una exhalación, llevan unos protectores de cuello, que creemos muy necesarios dada la velocidad que llevan. La temperatura es bastante baja a esa altitud ya que el sol se ha tapado. Hay una cafetería por si se quiere tomar algo calentito.

Bajamos y nos comemos unos frankfurts que es lo único que vemos. Al terminar cogemos el shutle que nos baja a la carretera donde un bus que pasa le decimos si va al centro histórico y dice que sí que nos avisa.

Al ser domingo todo está cerrado, problemas tenemos para encontrar algo abierto. Por casualidad llegamos a la Cafetería Modelo que está abierta desde 1950 y es el lugar para probar pastas y tentempiés tradicionales. La verdad es que todo tiene muy buena pinta.

Volvemos a la plaza Grande donde una señora nos advierte que somos unos pecadores y que iremos al infierno si no nos redimimos. La catedral para variar está cerrada. En la oficina de turismo nos informan y vemos unos libros de fotografías muy buenos.

Como no hay nada que hacer nos volvemos al hotel ya que al día siguiente madrugamos mucho para ir a Galápagos.

Día 12

QUITO – ISLAS GALÁPAGOS

Nuestro avión sale prontito con lo que antes de las 6 cogemos un taxi para que nos lleve por 6 $ al aeropuerto.

Como vamos a las Galápagos hay un control previo de todo el equipaje. Pasamos sin problemas. Tenemos que pagar 10 $ por ir a Galápagos en una ventanilla especial donde nos dan un impreso que tendremos que rellenar antes de llegar a las islas. A la hora prevista embarcamos bajo una lluvia torrencial y todo tapado.

Primero para en Guayaquil, donde unos cuantos ecuatorianos se bajan del avión y suben otros. Nos dan de desayunar dos veces, no mucho pero suficiente. Cuando llegamos a Baltra, pasamos inmigración y pagamos 100 $ que es el precio para los extranjeros de la entrada en Galápagos. Los nacionales pagan solo 6 $, y además el precio del avión es la mitad de lo que pagamos los extranjeros.

Islas Galápagos

Un autobús de la compañía de aviación nos lleva al embarcadero donde nos llevarán a la isla de Santa Cruz. Hace un calor brutal y un bochorno que nos hace sudar a chorros. El barco nos cuesta 0,5$. Allí mismo hay un bus que por 1,8 $ nos lleva a Puerto Ayora, que es donde están los hoteles, restaurantes, agencias etc. Si tienes un tour contratado los de la empresa ya te esperan en el aeropuerto y te acompañan a tierra donde ya están los autocares privados para estos turistas.

Representación infantil de la Isla de Santa Cruz

Se tarda una hora en llegar a Puerto Ayora, cuando nos bajamos del bus, ya hay un señor que nos ofrece su hotel. Vamos a verlo pero es muy cutre, con lo que nos vamos a buscar otro. Justo enfrente hay un hotel llamado España que es sencillo pero nos convence por precio y calidad. Nos cuesta 40 $ la triple con baño dentro y ventilador, aunque como hay aire acondicionado por la noche lo ponemos un rato. Hay wifi pero no en la habitación, solo en la entrada del hotel que hay una zona muy agradable con sillones, tumbonas o hamacas, donde se presta a hacer «public relations» con los otros turistas que te van informando sobre lo que han hecho y te van orientando.

En las islas es una hora menos que en la península, con lo que a pesar de tanto ajetreo solo son las 12 del mediodía. Está toda la ciudad muerta, todo cerrado, lo cual es normal porque los turistas están haciendo tours o haciendo submarinismo, snorkel etc.

Pequeñajo lobo asomando detrás de su mamá

Comemos en un restaurante donde el menú pone que en los precios se le tiene que sumar 12% de impuestos + 10% de servicio. Nos parece un poco exagerado ya que el precio de los platos no es económico y nos dicen que si no queremos factura no nos los cobrarán.

Nos comemos un pescado con ensalada muy bueno con cerveza y nos cobran 24 $, ya que aquí la cerveza está a 3$.

A las 2 del mediodía abren la oficina de turismo y allá que nos vamos. Un chico muy amable nos informa de todo lo que hay que hacer en esta isla, y nos comenta que hemos tomado una buena decisión de no coger tours sino que vayamos a las islas Isabela y San Cristobal, porque la gente que coge tours se cansa mucho ya que por ejemplo para ir a Isabela hay un trayecto entre ida y vuelta de 6 horas, y como han de ver cosas pues acaban agotados.

Después de todas las informaciones vamos al Centro de Investigación Charles Darwidonde hay más de 200 científicos de todo el mundo dedicados a la conservación de estas maravillosas islas. Todo está muy arregladito con unos caminos empedrados que te llevan sin posible error a ver todo lo visitable.

Iguana terrestre del centro Charles Darwin

Hay en el sendero una pequeña playa donde a veces se pueden ver animales pero nosotros vamos y no tenemos suerte. Como hay gente y hace mucho calor los animales están escondidos. Lo que si vemos son enormes iguanas que están justo en los senderos, aunque cuando te acercas se quedan quietas asustadas.

Hay bastantes guías naturalistas que van acompañando a los turistas de los tours y les van explicando lo que hacen, como lo hacen etc. Dentro de los turistas hay de todo, los que están interesados y los que han venido aquí porque queda bien, ya que en medio de la explicación del guía se ponen a hablar con voz en grito por teléfono. En ese momento el guía le llama la atención por su mala educación, ya que nuestras miradas asesinas no le hacían efecto.

Hay un centro de recuperación de tortugas y se ven desde las incubadoras, hasta las que tienen de 3 a 5 años, y luego las grandes que hay algunas muy grandes de más de un metro de diámetro en el caparazón. También está el solitario George, que según se dice tiene 275 años y Charles Darwin cuando vino en el Beagle ya lo vio. Están intentando que se aparee con tortugas pero hasta ahora no ha habido suerte y los huevos se han malogrado. Han venido unos investigadores norteamericanos y en la isla de Isabela han hecho un estudio de ADN para encontrar tortugas hembras que tengan un gran parentesco con George a ver si así hay suerte, ya que es de una isla llamado Pintay es el único vivo de su especie. Con él se extinguirá su especie si no se tiene suerte.

Tortuguita

Nosotros no lo vemos pero nos dicen que si que está. Hay unas iguanas terrestres muy bonitas también en este centro de unos colores amarillo-anaranjado muy llamativos.

No se paga nada para entrar ya que está dentro de los 100 $ que se pagan, pero dicen que si compras algo en la tienda ayudas a la investigación y conservación. Nos la miramos con cariño pero tiene unos precios exagerados ya que unos imanes cuestan 8 $ y es lo más barato.

Hay unos carteles donde está todo muy bien explicado, con lo que puedes ir tranquilamente sin guía.

De allí volvemos hacia el pueblo que está a 10 minutos andando y ahora está mucho más animado ya que las tiendas están abriendo y la gente vuelve de sus excursiones.

Hay tiendas de superlujo, que no hemos visto en ningún otro lugar de Ecuador, las cuales creemos que son de extranjeros por la decoración y el gusto que tienen.

Nos acercamos al muelle y vemos muchos pelícanos a los cuales te puedes acercar mucho ya que no se asustan nada, guanchos que son unos pájaros con una especie de plumas muy graciosos, tijeretas, lobos marinos, peces etc.

Hay un lobo marino que está en una especie de tienda de un pescador, que está tumbado durmiendo pero tiene un radar especial ya que cuando se acerca un comprador se pone erguido para que le de la piel del pescado o la raspa el vendedor ya que se lo prepara para su consumo. Los pelícanos también están allí atentos para ver si queda algo. Es un espectáculo gracioso que nos llena de emoción por la cercanía de esos hermosos animales.

Nos vamos después a las agencias a que nos informen de que ofrecen. Hay un tour de medio día que te llevan a varios sitios cercanos a Puerto Ayora que cuesta 35 $. Luego hay tours de día entero que te llevan a Isabella, San Cristobal, Seymour Norte etc. Los hay con snorkel y otros con submarinismo, que son más caros. Por ejemplo Seymour Norte cuesta 140 $ la más barata y después de un rato hablando con una vendedora de tours, nos dice que no vale la pena, que vayamos a las otras islas que veremos lo mismo y mucho más barato. Al preguntarle porque es tan caro nos dice que solo pueden hacer este tour 4 barcos cada día, y por eso tienen que subir el precio.

Pelícano ladronzuelo en la zona de pescadores

Al final decidimos seguir con nuestro plan y desplazarnos a las islas y desde allí hacer cosas.

Para ir a Isabella los barcos normales cobran 25$ y salen todos a las 2 de la tarde, lo mismo que a San Cristóbal, pero hay agencias que como hacen tours diarios, te ofrecen pagando 30 $ salir a Isabella a las 7 de la mañana y volver a las 3 y media en vez de las 6 de la mañana que hacen los barcos normales. Nosotros lo sopesamos pero no tomamos ninguna decisión todavía. Todas las agencias ofrecen lo mismo, con lo que después de ir a 2, ya no vamos a ninguna más.

En el puerto se ven todos los barcos de la gente que va en crucero que sobre las 6 de la tarde los vienen a buscar en lanchas para cenar y seguir navegando para llegar al día siguiente a otra isla. Los tours organizados duran 5, 7, 8 días que es lo habitual y luego pueden ser hasta 3 semanas. El estar en un barco tiene sus ventajas ya que te lo hacen todo y tú no te tienes que preocupar de nada, pero si hace mala mar, están de 6 de la tarde a 8 de la mañana, mínimo y según qué días están muchas más horas. Los precios oscilan pero los más baratos en un barco sencillo con condiciones sencillas, comida y guía normal, empezarían en 700 $ más o menos, cogiendo un last minute o ofertas de última hora. De ahí pueden llegar a 5000 $ o más a medida que subimos el nivel del barco y las prestaciones.

Hay un supermercado donde compramos algo de pan, queso, tomates y nos hacemos una cenita muy apetecible, con las cervecitas de rigor.

Día 13

ISLA SANTA CRUZ – TORTUGA BAY – RANCHO DE GALÁPAGOS GIGANTES – ISLA SANTA CRUZ

Nos han dicho que la Tortuga Bay es muy recomendable para ver animales y que con un poco de suerte se pueden ver tortugas desovando en la arena. Eso sí hay que ir muy prontito o cuando ya está oscureciendo. Ponemos el despertador a las 6 y media, pero no nos acordamos que es una hora menos con lo que suena a las 5 y media y como tenemos mucho sueño, no le hacemos caso. Con todo y con eso a las 6 y media ya estamos saliendo del hotel hacia la bahía.

Tijereta posada en un poste

Cogemos un taxi que por 1 $ nos deja en la entrada al parque. Abre de 6 a 6 todos los días y te tienes que registrar a la entrada, donde pones tu nombre, nacionalidad, pasaporte, hora de entrada y a la salida tienes que firmar otra vez.

Nos encontramos con muchos autóctonos que aprovechan el sendero para hacer footing, a esas horas (antes de las 7) ya han entrado al lugar 60 personas, pero como decimos, la mayoría deportistas que van corriendo al final y vuelven. Durante el camino vemos a muchos pájaros sobre todo pinzones de distintos tipos, los cuales son famosos, ya que Darwin se fijó en ellos y en la adaptación de su pico para empezar a desarrollar su teoría de la evolución de las especies.

Ave que se dedica a comer cangrejos.

Hay tunas (cactus muy grandes) que solo en estas islas se convierten en arboles con unos troncos espectaculares por su color y textura. Nos encontramos también alguna iguana despistada y lagartos con la cabeza roja muy bonitos.

Cuando llegamos a la playa hay unos carteles que anuncian que en esa playa no se bañe nadie ya que tiene grandes corrientes que te llevarían adentro y no podrías salir. En la arena se ven iguanas marinas de distintos tamaños, que encima de las rocas volcánicas que hay quedan totalmente mimetizadas, solo cuando se mueven se ven. En las rocas se ven cangrejos rojos muy grandes que resaltan sobre las piedras negras volcánicas.

Nosotros en la playa de Tortuga Bay

Atravesamos la primera playa y llegamos a la segunda que está totalmente calmada pues la protege una lengua de tierra. Como es marea baja tienes que meterte mucho rato para poder nadar. Se ven pececitos ya que las aguas son cristalinas. En las dos playas extensísimas, solo estamos 8 personas. Es un paraíso de arena blanca, con aguas cristalinas a una temperatura fresca pero no en demasía.

Las tijeretas vuelan muy bajo como si tuvieran curiosidad por nosotros como nosotros la tenemos por ellas. Hay otros pajaritos con un pico muy curvo que está totalmente adaptado para meterse en los agujeros de las rocas volcánicas y sacar bichitos o insectos. Vemos algún pelícano en la orilla esperando que lleguen las olas con algas que cogen con su enorme pico y se lo comen. Después de un largo rato disfrutando de este lugar y del desayuno que nos hemos preparado con las compras del día anterior, hacemos un sendero por un bosque de cactus, que lo más interesante son los nidos de iguanas que hay por todos sitios. En todas las informaciones pone que tienes que dejar 2 metros de distancia con cualquier animal o pájaro que te encuentres pero aquí es difícil ya que están en medio del sendero y pasas a medio metro como mínimo. Hay algunas que se enfadan y que escupen, otras cuando nos ven se van corriendo. Vemos peleas de machos que seguramente se están peleando por una hembra o por el lugar del nido. Los machos tienen un tamaño más grande, unos colores más brillantes y la cresta más larga, ya que tienen que competir y tienen que ser los más guapos para conseguir a la hembra. Hay algunas que miden más de 1 metro, dan un poco de miedo, sobre todo cuando te miran con esos ojos, diciendo que haces en mi casa importunándome!!!!!

Van pasando las horas y cada vez viene más gente con niños para pasar un día de playa. El sol está empezando a salir y castiga mucho.

Iguana marina en Tortuga Bay

Salimos de aquí y pasamos por un centro de capacitación de guías donde entramos ya que hay una exposición sobre todo lo que hacen para mejorar la gestión del parque nacional. Un chico muy atento nos explica todo lo que podemos ver en las islas y los mejores sitios para ver animalitos. Desde 2010, tienen un control satelital, ya que tienen problemas con barcos ilegales que entran en las 40 millas marinas que tienen las islas para pescar o los cruceristas que no respetan la ruta que tienen concedida. En el momento que se detecta y pasan 4 o 5 horas y siguen en un sitio que no deberían se manda una patrullera que están en sitios estratégicos para que investiguen. Si es un barco ilegal de pesca reincidente se le requisa el barco y los tripulantes a la cárcel. Ese barco a partir de ese momento pasa al estado y se dedica a labores de control y vigilancia. Nos alegra saber que disponen de ese control, ya que otra manera no podrían vigilar tantísima extensión y ser efectivos.

Tijereta cazada al vuelo

Nos comenta que hacemos muy bien en no contratar tours, y donde son los mejores sitios para avistar vida animal o excursiones a hacer en Isabella y San Cristóbal.

Cogemos un taxi que por 25 $ nos lleva cerca de Santa Rosa al rancho Primicias donde hay decenas de tortugas terrestres en libertad. Hay algunas enormes, de un caparazón de más de 1 metro de largo y más de 100 años de edad. Incluso un macho se pone encima de una pequeña hembra y parece que la va a chafar, porque la diferencia de tamaño es enorme. La entrada cuesta 3 $. Está lloviendo y parece que eso las hace más activas, de hecho muchas las vemos andando, aunque al momento se cansan. Vayas donde vayas te encuentras tortugas, incluso en medio de la carretera hay y el taxista tiene que hacer maravillas para no atropellarlas.

Galápago del Rancho Primicias

Justo al lado están los túneles de lava. Al entrar parece fácil, hay iluminación y son espectaculares esos túneles, ya que hay trozos que tienen una altura de más de 10 metros. Hay que ir bien calzado porque el terreno es irregular lleno de rocas volcánicas irregulares que hace difícil el trayecto, y cuando ya estábamos cansados de tanto túnel, hay un trozo de unos 3 metros en los cuales tienes que reptar como una serpiente y lo peor es que como está lleno de barro por las filtraciones de la pared nos llenamos de barro por todos lados. Si hay mucho interés se puede ver un trozo de túnel pero no llegar hasta el final porque no aporta nada y el último trozo se pasa mal.

Llegamos al hotel y está cayendo un tormentón de lluvia que no se ve nada. Como hemos madrugado mucho por la tarde hacemos un poco el vago y luego vamos a pasear por el pueblo un rato, ya que ha dejado de llover y es agradable.

En el hotel, después de cenar pasamos un rato agradable hablando con otros viajeros, por ejemplo una pareja de polaca y alicantino que viven en Varsovia, el trabajando de profesor de español, ya que nos comenta que hay mucho interés en aprender español. En los colegios tienen inglés obligatorio y pueden elegir como tercera lengua el español, entre tres lenguas que se ofrecen. Cenamos un poco de pan con queso que compramos en el super y a descansar.

Día 14

SANTA CRUZ – LAS GRIETAS – ISABELA

Hoy no madrugamos demasiado y vamos a desayunar en un bar muy moderno que se llama The Rock que está en el malecón y que hay que tener en cuenta que el precio que te pone en el menú no tiene incluido el 12% de Impuestos ni el 10% de servicio.

Alquilamos un snorkel por la posibilidad de ver pececitos en las Grietas. Nos cobran 2 $.

Tenemos pensado ir a Las Grietas, lo cual es muy fácil por tu cuenta. Se coge un taxi acuático en el muelle nuevo por 0,6$ que te cruza a la otra parte de la isla. Desde allí hay un paseíto por un sendero muy señalizado no muy largo y por donde pasas por una playa llamada de los perros, que está justo delante de un hotel muy moderno que se llama Finch Bay Eco Hotel, con una piscina espectacular. Te vas encontrando iguanas marinas que salen de cualquier rincón.

El camino a Las Grietas es de roca volcánica con lo que es muy recomendable ir bien calzado porque si no tienes peligro de sufrir un accidente. Es un paisaje formado por interesantes fisuras de lavan que forman dos paredes gigantes atravesadas por un brazo de agua salobre filtrada desde la parte alta donde se mezcla con el agua del mar. Se puede nadar y hacer buceo de superficie por la transparencia de su agua. Se pueden encontrar también cactus gigantes donde los pinzones se lo pasan genial. El baño está muy bien ya que como hace un sol de justicia llegamos sudando. Para entrar tienes que tener que cuidado pero luego es muy agradable. Hay niños y no tan niños que se tiran de gran altura ya que hay trozos muy profundos, aunque hay que tener cuidado porque ellos saben en qué sitios hay profundidad y en cuáles no.

Las Grietas

Después de un ratito haciendo el vago y disfrutando del lugar volvemos por el mismo sendero a coger otro taxi que nos lleve al muelle.

Vamos a comer y después ya vamos a buscar las mochilas ya que a las 2 cogemos el barco hacia Isabela, pues hemos comprado el tiquet el día anterior por 25 $.

Nos han convocado a la 1:30, y es que hemos de pasar un control en nuestras mochilas para que no llevemos ninguna fruta o verdura a la otra isla para evitar plagas y traspaso de enfermedades. Hay algunos que llegan tarde con lo que son las 2 y cuarto cuando empezamos a salir pero ¡¡¡¡oh desgracia!!!! Se ha descolgado uno de los motores del barco con lo que hemos de volver para que lo arreglen. No nos dicen nada, con lo que la gente al final empieza a protestar. Nos dicen que en un cuarto de hora estará arreglado, pero hay quien dice que tendríamos que cambiar de barco. Los ánimos están exaltados porque vamos como sardinas y aun quieren meter a otro turista con lo que nos tendríamos que achuchar más. Hay, ya se planta una señora del país y dice que ya está bien de abusar. Como la señora no calla, diciendo que llegaremos muy tarde, que si va muy cargado el barco etc., cuando terminan de arreglar el motor descolgado el capitán del barco dice que no nos preocupemos que llegaremos a las 4 de la tarde a Isabela que era la hora de llegada inicial. Va a una velocidad vertiginosa porque está cabreado y vamos dando botes todo el rato. Llegamos en 2 horas o sea a las 4 y media, pero aquí no acaban las sorpresas pues el barco no puede entrar en puerto, solo las barcas muy pequeñas y tenemos que pasar a otra barca para llegar al fin al puerto de Isabela.

Representación de la Isla de Isabela

A lo lejos vemos pingüinos bañándose. El puerto es muy pequeño y justo cuando llegamos tenemos que pagar un impuesto de 5$ por persona por entrar en esta isla. Hay dos lobos marinos jugando y persiguiéndose que son muy guapos.

Puerto Villamil, originalmente se llamaba Albermarle o Santa Gertrudis. Es la más grande del Archipiélago, ocupa más del 58% de toda la superficie terrestre de las Galápagos. Consiste en una cadena de seis volcanes bastante jóvenes e intermitentemente activos. Uno de ellos, el Wolf, es el punto más alto del archipiélago, con alrededor de 1707 metros de altitud. También está uno más antiguo, el Ecuador de 610 metros. Es una zona viva y en constante formación, para comprobarlo, hay que visitar uno de sus seis volcanes. Es la tierra de los contrastes.

En 1973, Isabela fue reconocida como el tercer cantón de la provincia de Galápagos, su puerto principal es Puerto Villamil, en esta isla existen lagunas salobres que albergan a decenas de flamencos, playas de arena blanca originada en el coral, cráteres que muestran signos de erupciones recientes y grietas marinas donde se divisan a las tintoreras. Isabela también es historia, cerca a Puerto Villamil, su centro urbano, están los restos del “Muro de las lagrimas” como testigo de la colonia penal que existió aquí desde 1946 hasta 1959. Para castigar a los presos se los obligó a construir un muro con bloques de lava de 100 metros de largo por 7 metros de altura. Se puede ascender a través de unas escalinatas y tener una vista panorámica del lugar. Además se aprecian las bases de cemento donde los norteamericanos tenían sus casas de madera durante la Segunda Guerra Mundial.

Flamenco bebiendo de las ácidas lagunas

No tenemos hotel, pero nos han recomendado en Santa Cruz, el Volcano. Llegamos pero nos pide 25$ por persona y por lo que nos da nos parece caro. El taxista nos lleva a otro llamado Insular que está cerca pero más alejado de la playa y nos pide 15$ por persona con baño , wifi y nos quedamos. Nos pide por el traslado 1$ por persona pero solo le pagamos 1$ por el taxi, que es el precio estándar por cualquier trayecto dentro del núcleo urbano de las islas.

Isabela es una isla muy grande comparada con el resto pero Puerto Villamil es bastante más pequeño y destartalado que Puerto Ayora.

En un cuarto de hora yendo lentamente lo has recorrido todo. Nos acercamos a la oficina de turismo pero está cerrada, aunque otro funcionario nos explica algunas cosas de la isla que se pueden hacer. Aquí no podemos hacer nada por nuestra cuenta, ya que tienes que ir siempre con un guía naturalista. Nos recomienda ir a unos pequeños islotes que hay enfrente de Isabela que se llaman Las Tintoreras porque hay tiburones de esa especie y te puedes bañar con leones marinos y tortugas.

Solo se puede visitar una pequeña parte (zona sur) de la isla ya que el resto solo está permitido a los científicos. Se puede visitar el volcán Sierra Negra (2º más grande del mundo, ya que el cráter mide 10 km de diámetro) y el volcán Chico en una misma excursión. No sabemos si hacerlo ya que hay que andar más de 5 horas y no te garantizan que veas nada. Está a 25 km de Puerto Villamil, hasta el Cura, donde te deja el coche y a partir de ahí, 2,5 horas hasta la fumarola y luego otros 2,5 horas hasta el final del treking. En el año 2005 entró en erupción y soltó una columna de humo de 20 km de altura. Cuesta 35 $.

Pelícano y cangrejo

Hay otro volcán Alcedo de 1097 metros, famoso por su caldera de 7 km de ancho y sus enormes fumarolas que alberga la mayor población de tortugas terrestres gigantes de las Galápagos, aunque también hay más de 50000 cabras salvajes que viven aquí y que amenazan a las tortugas pues suponen una competencia directa por el alimento. Existe una campaña para preservar la población de tortugas terrestres en Alcedo. Además hay jóvenes halcones planeando en las corrientes térmicas. Se requiere permiso y se tardan unos días en poder acceder a este volcán. No lo ofrecen en las agencias.

Esta isla no la incluyen en los circuitos ya que la mayor parte de sus puntos de interés se hallan en el lado oeste y para acceder a ellos desde Santa Cruz hay que hacer una larga travesía de más de 200 km.

El primer punto del lado oeste en el que se puede desembarcar es la punta Tortuga, una playa rodeada de mangles en la base del volcán Darwin (1280 metros). Aunque no hay senderos se puede desembarcar en la playa y explorar en busca del pinzón de manglar que solo se encuentra en esta isla y en Fernandina.

Al sur de la punta Tortuga se halla la caleta Tagus; aquí solían fondear los barcos y los marineros dejaban grabados los nombres de sus naos en los acantilados de alrededor. Es extraño ver pintadas junto a lobos marinos. Sirvió como anclaje popular para los balleneros, piratas y otros navegantes desde el año 1836. En esta época los visitantes marcaban sus nombres en los barrancos como muestra de su llegada en este sitio.

Su nombre Tagus se origina de un barco de guerra inglés que pasó por las islas en el año 1814. En este sitio se puede observar iguanas terrestres y tortugas gigantes.

Otra cosa que se puede visitar son los humedales. Nos acercamos a una poza donde hay flamencos, y vemos uno en la lejanía, que tiene un color rosa salmón muy subido por las sales que tiene el agua.

Compramos algo de fruta que es lo único que no está desorbitado de precio ya que una piña entera cuesta 2,5 $, 4 kiwis 1 $, 1,5 $ la libra de tomates. En cambio una lata pequeña de espárragos cuesta 5,8 $ y todo así.

Cuando volvemos al hotel resulta que no hay wifi pero nos ofrecen ir a la tienda de abajo que es suya también y que nos conectemos. Al día siguiente lo arreglarán, o eso han dicho. El aire acondicionado se agradece un rato ya que hace mucho calor.

Día 15

ISLA ISABELA

Esta mañana vamos a ir a Concha Perla que es una bahía de poca profundidad, agua tranquila y transparente que permite observar la fascinante fauna marina, es posible nadar con lobos marinos y pingüinos; es ideal para la práctica de deportes como natación o buceo de superficie. Esta muy cerca de la población y se llega andando en 15 minutos más o menos. El sendero está al lado del muelle turístico pero la distancia está mal porque pone que se tarda mucho rato y son solo 5 minutos por una pasarela hecha en medio de los manglares donde se ha de tener cuidado de no darte en la cabeza con alguna rama de algún árbol.

Hay una pequeña entrada donde hay una escalera y te metes en el agua. Estás rodeado de leones marinos que te pasan al lado rozándote incluso con sus aletas. Cuando estamos allí de pronto un león marino juvenil, como hay niños cerca, sale del agua y se pone al lado nuestro observándonos con esa carita tan guapa y sus grandes bigotes. Los niños pasan al lado suyo casi rozándole, lo cual no es bueno porque a veces las madres cuando se les toca los rechazan porque ya no huelen como antes. Después de un gran rato, sigue allí sin inmutarse, hasta que se cansa y se tumba a dormir en medio del paso a la bahía. Hay iguanas nadando y muchos pececitos.

Lobo jovencito

De allí vamos a buscar un lugar para comer, ya que por la tarde hemos contratado el tour de las tintoreras. Salimos a las 2 de la tarde de la agencia que nos lleva al embarcadero. A muy corta distancia de Puerto Villamil se encuentra el islote de “Las Tintoreras” llamado así por la existencia de una grieta de lava con agua tranquila y transparente donde suelen descansar los tiburones de aleta de punta blanca, llamadas Tintoreras. Se puede practicar buceo de superficie en un sector señalizado para esta actividad en ese sitio de visita, además de observar pingüinos.

Pingüinos de Galápagos

Nos montamos en la barca y nos lleva a un islote donde hay una colonia de pingüinos, solo unos 20, hay otras zonas más aisladas donde hay más pero no se puede acceder fácilmente. Justo al lado vemos a dos piqueros patas azules que son los primeros que vemos y están muy cerca. Desembarcamos y hacemos un paseo circular donde el guía nos va explicando todo lo que estamos viendo, tipos de plantas, el porqué de la superficie de la roca volcánica y sus colores cambiantes según la posición donde están etc. Hay un pequeño canal donde podemos ver las tintoreras, ya que es un lugar de descanso para ellas y se ven muy cerca de la superficie. Hay algunas enormes, vemos rayas, tortugas y iguanas a millones, en un lugar hay cientos puestas juntas y mirándonos con sus grandes ojos.

Cartel de entrada a las Islas Tintoreras

Llegamos a una lobería donde vemos por primera vez lobitos marinos acabados de nacer con su pelaje marrón color chocolate, chillando buscando a sus madres que seguramente están en el mar alimentándose. Son muy tiernos y te dan ganas de cogerlos y achucharlos. Además de estos enanos, hay otros ya un poco más grandes que no paran de jugar entre ellos.

Tintorera

Al acabar el sendero, vamos a un lugar donde se puede hacer snorkel, pero al momento la gente vuelve ya que el mar está muy movido y no se tiene ninguna visibilidad. Nos explica el guía, que para nosotros es malo pero que para las especies marinas es buenísimo, ya que es la comida que ellos necesitan.

Volvemos a Puerto Villamil y nos acercamos al hotel a ducharnos y nos está esperando una encargada del hotel para pedirnos excusas por la falta de internet. Asegura que es un problema de la compañía telefónica y que ellos han hecho todo lo posible para arreglarlo pero que no ha habido manera. Le pedimos alguna compensación y ella dice que nos invita el hotel a cenar en un restaurante, que nos dejará en la habitación la dirección del restaurante donde nos estarán esperando.

Nos vamos a la playa muy bonita con una arena blanca y muy agradable de pisar. Salimos dirección a la Poza de las Diablas. Es una laguna ubicada junto al camino que conduce desde Puerto Villamil hasta el conocido “Muro de las lágrimas”. Es uno de los principales sitios de observación y reproducción de flamencos. El sendero sigue hasta la poza Puerta del Jelí, y Poza Baltazar. Vemos 3 flamencos muy cerca, buscando en el agua comida, lo hacen arrastrando el pico y extrayendo la comida. Hay que estar muy en silencio para que no se asusten. Al final del sendero llegas al centro de crianza Arnaldo Tupiza, donde se observan tortugas de todas las edades y se puede conocer el periodo de crianza y reproducción en cautiverio para recuperar las poblaciones de estos reptiles, considerados en peligro de extinción. Las tortugas gigantes, son el emblema de las Islas Galápagos y la isla Isabela es la única en el mundo con 5 diferentes especies. Está abierto de 7 de la mañana a 5 de la tarde.

De vuelta vamos a buscar un billete de barco para volver a Santa Cruz y nos dicen que está todo lleno. Después de un rato, sale un barco y si que podemos comprar el pasaje por 25 $. Sale a las 6 de la mañana pero tenemos que estar a las 5 y media.

Volvemos al hotel y allí tenemos un mapa y las instrucciones para llegar al restaurante que está a cuadra y media del hotel. Nos dan un plato de pescado con arroz y ensalada muy bueno, con zumo de tomatillo y un cuenco de fruta.

Día 16

ISABELA – SANTA CRUZ – SAN CRISTOBAL

A las 5 y media cogemos un taxi que nos ha llamado nuestro hotel. A la hora de pagar nos pide 2 $ por persona, pero nosotros al preguntar en el hotel nos dijo 2 $ el taxi, con lo que es lo que pagamos, aparte otro cliente del hotel viene con nosotros. Está a unos 15 minutos, andando muy cerca.

Nos vuelven a revisar el equipaje, y al preguntar si llevamos algo de fruta y decir que kiwis, nos los dejan pasar sin problemas.

Hay una mar muy tranquila con lo que podemos incluso dormir. Al llegar a Santa Cruz vamos a comprar los pasajes hacia San Cristóbal para no tener sorpresas, por 25 $. Nos dicen que tenemos que estar a las 13:30 en la agencia que nos acompañarán al barco.

Vamos a desayunar muy cerquita de allí, un desayuno continental que al protestar porque no queremos pagar impuestos y servicio, la señora dice que el servicio lo puede quitar pero el IVA nos lo cobra (12%). Todo es muy relativo, depende del bar, te cobran todo, o solo el IVA o nada.

Hasta la 1 y media tenemos tiempo y nos planteamos hacer algún tour, por ejemplo El Garrapatero, que es una hermosa playa donde puede uno se puede recrear en el paisaje de aguas turquesas. Detrás de la playa hay una laguna habitada por flamencos y patillos de cuello negro. Los pinzones de Galápagos y otras aves migratorias de las costas son fáciles de encontrar. Otra opción sería ir a ver Los Gemelos que son hundimientos formados por una serie de erupciones volcánicas. Es el único lugar donde se encuentra el bosque de Escalesia, planta endémica de esta zona y algunas especies como el pájaro brujo.

Al final nos decidimos por quedarnos en el pueblo e ir a la playa ECD, que es la que está al lado de la fundación Charles Darwin. Menos mal que hay un sitio con sombra porque hace un sol de justicia y quema aunque te pongas crema. Hay algunas iguanas y algún que otro lobo marino justo al lado de donde te bañas.

Cuando ya estamos saturados de sol, vamos a comer al restaurante donde habíamos desayunado, pero cuando ya hemos pedido vienen los grupos que van en cruceros y nos pasan por delante, con lo que tenemos que comer deprisa y corriendo.

Cuando vamos a pasar el control de sanidad, ven que acabamos de venir esa mañana de Isabela y no nos revisan nada.

A las 2 salimos hacia San Cristóbal, con muy mala mar, grandes olas, que hace que nos tengamos que refugiar dentro del barco ya que fuera, en un momento estamos empapados.

Llegamos en 2 horas hasta San Cristóbal a Puerto Baquerizo Moreno. Es la capital de la provincia de Galápagos, sus principales actividades son la pesca y el turismo que se han desarrollado de una manera sostenible con el entorno. La parte alta de San Cristóbal tiene haciendas ganaderas y varias fincas agrícolas cuyo producto destacado es el café orgánico.

A su belleza escénica y natural se le suma un interesante pasado parte del patrimonio cultural tangible e intangible de las islas, existió aquí una sociedad pesquera llamada “La Predial” que tuvo su florecimiento entre los años 1952-1960. Además se instaló un gran y exitoso ingenio azucarero liderado por Manuel J. Cobos.

Desde hace cien años, San Cristóbal ha estado habitada, esto se debe principalmente a sus muchas fuentes de agua dulce ubicadas en la sierra interna de la isla. A una altura de 650 metros incluso, se encuentra un lago de agua dulce en el cráter “El Junco”, es el único en su clase en todo el Archipiélago, durante la época lluviosa el nivel aumenta y las fragatas utilizan sus aguas para limpiar sus plumas de la sal marina y disfrutan su abundancia.

Nos reciben cientos de lobos marinos que están absolutamente ocupando todos los espacios. Nos comentan que antes estaban en una playa que se llama La Lobería, pero que ahora se han desplazado a todo el pueblo, de hecho en ocasiones atraviesan la carretera y tienen problemas para no atropellarlos. Hay incluso una fuente en el Malecón y que hay dentro????, pues un lobo marino bañándose como si fuera su piscina particular.

Lobos y lobos por todas partes

Tenemos que buscar hotel, y según la LP hay uno que está bien que se llama Marazul. Preguntamos y después de regatear un poco nos deja una habitación con 2 ambientes separados con dos camas cada uno por 50 $ con aire acondicionado, baño, nevera, TV y wifi fuera cerca de recepción. Es un sitio muy agradable pues tiene un gran comedor donde leer o mirar internet. No ofrecen desayunos, pero hay una gran cocina que puedes utilizar si quieres cocinar, con cubiertos, platos etc.

Nos comentan en la oficina de turismo que este día empiezan las fiestas de San Cristóbal, que hay una cabalgata, fuegos artificiales etc.

Preguntamos en las agencias los tours que ofrecen para tener una idea. Hay básicamente 2, el de interior y el del León Dormido. El primero cuesta 35 $ y te llevan a la Laguna el Junco, La galapaguera de Cerro Colorado y Puerto Chino. Se tarda unas tres horas. El segundo cuesta 50 $ y te llevan a Isla Lobos, León Dormido y Playa Ochoa. Incluye un almuerzo.

En este pueblo hay dos calles la Avda Charles Darwin que es la que va paralela al Malecón y en donde encuentras la mayoría de restaurantes, tiendas de souvenirs y agencias de tours, y la Avda Alsacio Northia.

Como nos habían dicho, en el Malecón han decorado unas furgonetas y en ellas van las aspirantes a miss San Cristóbal, y como jurado ha venido la Reina de Quito. Van cada una de ellas con un marinero que las cuida y vigila.

Es muy entrañable, después de desfilar un poco, hay unos pocos fuegos artificiales y ya está toda la fiesta acabada.

Han inaugurado hace poco tiempo el Muelle Ecoturístico Artesanal. Está construido con materiales naturales. Durante el día el transporte marítimo utiliza el muelle flotante para embarcar y desembarcar sus pasajeros, en la noche se puede apreciar los acuarios iluminados donde se observa peces, lobos marinos, mantas y tortugas marinas. Posee bancos, una pequeña plaza para conciertos nocturnos y columpios y juegos para niños que en muchas ocasiones es ocupado por los lobos marinos que se tiran incluso por un tobogán que lleva al agua.

Día 17

SAN CRISTÓBAL- CENTRO DE INTERPRETACIÓN – CERRO LAS TIJERETAS – PLAYA DEL AMOR – LA LOBERIA

Después de desayunar fruta que hemos comprado en un supermercado, por cierto, muy buena, vamos en un taxi que nos cobra 1 $ al Centro de Interpretación. Fue construido en 1998, (inagurado por el Príncipe Felipe) por el Parque Nacional Galápagos y la Agencia Española de Cooperación Internacional. Está ubicado al norte de la ciudad. Compuesto por 3 construcciones autónomas conectadas por pasarelas y senderos. Presenta salas de exposición y conferencias, sala de historia natural que explica el origen de las islas, sala de historia humana que describe la presencia humana desde el descubrimiento de los Galápagos y la sala de conservación donde se muestra el interés por proteger y conservar el medio ambiente. Posee algunos senderos de autoguía, un auditorio al aire libre, algunos modelos a escala de barcos y una carta geográfica en alto relieve de las islas. Se puede visitar de lunes a domingo de 6:30 a 17:00.

Se llama Cerro Tijeretas porque hay muchas

Nos recibe un guía naturalista que nos informa de todo lo que vamos a ver y nos explica que este centro de interpretación está hecho de una manera que cualquier persona lo pueda entender y dedicado sobre todo a la gente que vive en las islas para que entienda la fragilidad de ellas y que todos somos responsables de su conservación para generaciones venideras.

Nos informa del grave problema que tienen con los chivos, ya que no tienen depredadores y compiten con las tortugas por el alimento. Han traído un chivo de Nueva Zelanda que le llaman el chivo judas porque encuentra a las manadas de chivos, y así se pueden hacer campañas de exterminio. No son muy eficaces porque la isla es escabrosa y son muy hábiles para escaparse.

Otro gran problema son los gatos, que esto ya nos fastidia más que hagan campañas de exterminio, ya que nosotros somos grandes amantes de los felinos y creemos que se podría esterilizar pero no matar.

En los paneles informativos habla de la creación de una fábrica de azúcar en 1891 por parte de Manuel J. Cobos lo que marcó el inicio de una importante presencia humana en la isla. Cobos contrató a presos del continente para trabajar en el trapiche, ubicado en el Progreso, importó vagones de tren y acuñó su propia moneda, el cobo. Este utópico proyecto experimental duró 25 años, hasta que los trabajadores se rebelaron contra Cobos y le mataron en 1904; luego su hijo tomó el mando, pero no tuvo mucho éxito. El Progreso es ahora una pequeña aldea en la que se pueden ver las ruinas de la fábrica y el sitio donde está enterrado Cobos.

En otro panel, hay una historia de la crónica rosa, pues explica una pareja de alemanes que ilusionados con la vida idílica que se presuponía en estas islas, se pusieron a vivir de una forma autónoma y al poco tiempo llegó otra pareja con su hijo. Todo iba la mar de bien hasta que una baronesa alemana muy rica llegó a la isla con sus tres amantes y sembró la discordia. Hubo asesinatos por celos, desapariciones de gente que nunca más se supo. La baronesa después de tanta desgracia volvió a Alemania con tan mala suerte que un bombardeo aéreo la mató.

Desde el cerro de Tijeretas

Con la promesa de pesca abundante vino una colonia de más de 2000 noruegos, los cuales montaron una empresa de pescado que no salió bien. Hay más historias curiosas de personas emprendedoras que no les salieron bien sus empresas como si la isla se rebelara a esta ocupación forzosa.

Gigantesca estatua de Darwin

Después de empaparnos de tanta cultura, subimos por el sendero al Cerro Tijeretas. Se le llama así por la gran cantidad de tijeretas que habitan y anidan en la zona. El circuito tiene una distancia de 2,5 km y el tiempo estimado de la visita es de 2 horas, posee miradores a lo largo del recorrido desde donde se puede observar el paso de ballenas, principalmente entre los meses de junio y octubre.

Hay una gran estatua de Charles Darwin por el circuito. Desde arriba de los miradores vemos una tortuga que está como una reina abajo nadando tan ricamente. Las fragatas las tenemos posadas en los arboles a menos de un metro, tan tranquilas. Vemos algún macho con el pecho rojo pero no inflado.

De allí nos vamos a la playa del Amor, donde curiosamente nos encontramos disfrutando de la playa a la reina de Quito con su madre y un policía que las lleva de paseo. Nos metemos en el agua y al momento tenemos a dos lobitos jóvenes que nos rodean con gran curiosidad, casi nos tocan, cuando de pronto viene a toda velocidad el abuelo de estos jóvenes y nos da un susto de muerte. Es como si nos viniese a avisar de que cuidado con los pequeños que no le hagamos nada.

Lobitos jugando con nosotros

Pasamos un rato muy agradable hasta que el sol hace que nos refugiemos debajo de unos manglares donde está la reina de Quito que nos explica que ser reina no es solo ser una belleza sino que tiene que trabajar en una fundación para cuidar a niños con problemas y que ha tenido que dejar los estudios de periodismo para dedicarse este año a ese trabajo.

Lobito

Han estado en España y parte de Europa y comentan que Barcelona les gustó mucho y que quieren volver.

Nos ofrecen llevarnos al pueblo en su furgoneta y aceptamos claro. Vamos a comer unas hamburguesas pero no acertamos ya que están bastante malas.

Nos vamos a descansar un rato al hotel y cuando el sol ha bajado un poco vamos en un taxi por 2 $ a la Lobería. Es un buen lugar para ver muchos lobos marinos e iguanas. Se observa la vegetación litoral y seca en donde es común el mangle, monte salado, muyuyo y palo verde.

Hay muchos jóvenes haciendo surf ya que las olas son enormes. Hay familias ecuatorianas bañándose con sus niños, todo muy familiar. La puesta de sol es magnífica con una paleta de colores rojos, amarillos y azules increíble de describir.

Volvemos andando por una carretera recién asfaltada que se acaba en la Lobería, pero al momento nos viene a buscar en un taxi un guía con el que hemos estado hablando de nuestro interés por hacer el tour del León dormido en la Lobería.

En ese momento pasamos por el palacio de Deportes donde la reina de Quito está inaugurando la nueva iluminación y damos fe que tiene una gran potencia.

Nos lleva a una agencia donde nos ofrecen el tour por 50 $ nos lo explica y nos convence para hacerlo al día siguiente. Vemos que están apuntados los amigos polacos y españoles que conocimos en Santa Cruz. Nos dicen en la agencia el hotel donde están alojados y vamos a ver si están pero no hay suerte. Vamos a cenar a un restaurante pero deja bastante que desear lo que nos dan, no siempre se puede acertar.

Día 18

SAN CRISTOBAL – ISLA LOBOS – LEON DORMIDO – PLAYA OCHOA

A las 9 de la mañana ya estamos en el embarcadero donde nos espera el capitán con el barco y allí vemos a nuestros amigos que hacen el mismo tour que nosotros.

A unos 45 minutos llegamos a la Isla Lobos. Como su nombre indica se encuentra un gran número de lobos marinos con los cuales nadas y haces snorkeling. También vemos colonias de anidación de aves, como piqueros patas azules, enmascarados y fragatas. Hay mantas rayas enormes, tortugas, iguanas y muchos peces de distintos tamaños y colores. Hay poca profundidad y es una primera aproximación ya que en el León Dormido hay más.

Fragata macho con el pecho bien hinchado

Después de 1 hora más o menos, volvemos al barco y el capitán nos dice que un motor falla y que podemos hacer dos cosas o seguir el tour aunque tardemos mucho o volver a puerto y nos devuelve el dinero. Miran el motor y ven que si una persona va apretando el tubo de la gasolina el motor funciona con lo que es lo que hacen y seguimos el tour.

Piquero de patas azules

Llegamos al León Dormido o Kicker Rock. Consta de un peñón rocoso en forma de obelisco que emerge del mar. Entre las rocas se forma un canal especial para realizar buceo de superficie y buceo. Primero nos da la vuelta al peñón y nos va enseñando todos los pájaros que vamos viendo. Vemos fragatas con el pecho inflado por fin, gaviotas de lava, golondrinas de galápagos, pájaros tropicales, piqueros patas azules, pelícanos y piqueros enmascarados.

Leon Dormido

La isla es un cono de tobas de empinadas paredes que la erosión ha dividido, los barcos pequeños pueden navegar entre las dos rocas. Hacemos buceo de superficie y el sol que se refleja en las rocas hace que unas colonias de anémonas brillen con todo su esplendor. Hay montones de tortugas que nadan al lado nuestro sin ningún temor, muchos peces y al final se ve un tiburón muy cerca aunque no muy grande. Todo el mundo viene emocionado por la experiencia. Si te cansas te dan un flotador para que simplemente mires sin preocuparte de nadar. Una pareja de argentino y uruguaya han hecho submarinismo por primera vez en Isla Lobos y ahora se encuentran muy mareados por la inmersión.

Leon Dormido más de cerca

Poco después se acercan a la playa Ochoa donde comemos. El menú son rodajas de pan de molde con una mezcla de atún con lechuga, mayonesa, tomate, pepino, queso y colas. También nos dan plátanos y unas pastas. Hay unos niños que se bañan en la playa, bueno más que bañarse se tiran del barco, vuelven a subir, se tiran y así todo el rato. El resto preferimos quedarnos a la sombra.

Grietas espectaculares llenas de vida

Volvemos a Puerto Baquerizo y nos vamos a tomar unas cervezas, aunque nos dicen que estamos infringiendo la ley, ya que los domingos en Ecuador, solo se pueden vender cervezas hasta las 4 de la tarde y siempre comiendo, no a palo seco. Igualmente nos sirve las cervezas que entran muy bien.

Volvemos al hotel a cambiarnos y quitarnos la sal. A las 7 hemos quedado para ir a cenar pero en ese momento cae el diluvio universal. Nos ponemos perdidos y las calles llevan 30 cm de agua. Escogemos el restaurante Rosita que tiene buena pinta. Nos pedimos unos pescados con salsa de champiñones muy bueno, aunque no barato ya que cuesta 12 $ el plato. La ventaja es que no nos cobran los impuestos ni el servicio.

Día 19

SAN CRISTOBAL – CEIBA GIGANTE – LAGUNA EL JUNCO – GALAPAGUERA DE CERRO COLORADO – PUERTO CHINO

Hoy cogeremos un taxi para hacer lo que se hace en el tour de interior. Cuando estamos negociando con un taxista una señora se acerca para decirnos que si queremos compartir el taxi para pagar menos. Ellos negocian y lo consiguen por 45 $.

En primer lugar pasamos por la aldea El Progreso, situada 8 km al este, en la base del cerro de San Joaquín, el punto más alto de San Cristóbal con 896 metros. De aquí vamos a la casa del Ceibo, una pequeña cabaña construida en mitad de una enorme ceiba. Es la más grande del mundo y tiene 300 años de antigüedad. Ahora se ha convertido la cabaña en una habitación que se alquila a 20 $ por persona. La ceiba también la utilizan para escalar tiene unas cuerdas y por un módico precio puedes escalarla.

Laguna del Junco

Por un camino de tierra se llega a la laguna El Junco, una laguna de agua dulce a 700 metros sobre el nivel del mar. Esta es una de las pocas masas de agua dulce permanentes de las Galápagos. En ella se ven rabihorcados bañándose para limpiarse la sal de las plumas, patos gargantilla y pollonas negras, así como la vegetación típica de la zona, compuesta por Miconia y helechos arborescentes endémicos. Está en el interior de un volcán inactivo. Se puede visitar de 6 de la mañana a 6 de la tarde. En muy poco rato se puede rodear la laguna y se puede divisar distintas partes de la isla. Enfrente hay 3 molinos de energía eólica, que dan electricidad a la isla y son los primeros de todo Ecuador.

Galapaguera de Cerro Colorado

De allí nos lleva a la Galapaguera de Cerro Colorado. Fue construida en 2002 con la finalidad de incrementar la población de las tortugas gigantes endémicas de San Cristóbal. Son 12 hectáreas de bosque seco en el sector de Cerro Verde. Es un pequeño centro de interpretación donde se puede conocer más acerca de estos reptiles y los programas para su conservación y reproducción. Nos explica el guía que las tortugas de diciembre a mayo están en época de reproducción y de junio a noviembre hacen nidos para poner los huevos. Cuando encuentran un lugar que les guste, el cual pueden tardar en encontrar hasta 2 semanas, ponen los huevos y con excrementos lo tapan unos 6 cm para protegerlos. Las tortuguitas se alimentan de su propia yema hasta que se les cierra un agujero en la barriga y salen al exterior. Los primeros años son muy vulnerables, porque el caparazón es muy débil y cualquier depredador lo puede romper. A partir de los dos años ya es más seguro. En medio de la visita cae otro diluvio y esta vez no tenemos ningún sitio para protegernos ni llevamos paraguas o capelina. Nos ponemos en breves momentos empapados de arriba abajo, incluso la máquina de fotos se empaña la pantalla de tanta humedad.

Como última visita nos lleva a Puerto Chino que es una hermosa playa de arena blanca. Se accede por un sendero caminando unos 15 minutos. Es un lugar propicio para observar aves marinas como un hermoso piquero pata azul que tenemos al lado.

Playa Chino

Volvemos a la ciudad pagando nosotros 25 $ al taxista. Si hubiésemos ido con tour nos hubiésemos gastado 35 $ por persona.

Muchos cangrejos adultos (se sabe porque son rojos)

A la tarde paseamos un poco por la ciudad y para cenar nos vamos a un restaurante que se llama el Descanso del Marinero. Pedimos camarones al ajillo y camarones a la plancha. Cual no será nuestra sorpresa cuando sacan una plancha antigua de las de carbón que dentro están las gambas a la plancha. Qué pena haber descubierto tarde este restaurante porque todos los platos, los sirven muy originales y el precio es bueno.

Día 20

SAN CRISTOBAL – QUITO

Vamos a desayunar al Malecón, pero como no hay luz, la variedad que podemos escoger no es muy grande. Tienen muchos problemas de cortes de suministro, con lo que por ejemplo las tiendas están a oscuras, las maquinas de café no funcionan etc.

Amanecer en el Malecón

Tenemos unas horas hasta que salga el avión que dedicamos a buscar unas camisetas para los hijos de Elena y así va pasando el tiempo. Vamos al aeropuerto en un taxi, aunque nos lo podríamos haber ahorrado ya que está a 500 metros del hotel o menos. A las 12 ya nos hacen pasar el control de seguridad que es muy poco seguro, ya que pasamos el equipaje de mano por el escáner pero no hay nadie mirando.

Hasta pronto Galápagos…

El avión sale puntual y a la hora y media llegamos a Guayaquil. Entre medio nos dan de comer pollo con arroz, una mini ensalada y una mousse de piña. En Guayaquil paramos una hora para que salga la gente y entre la que va a Quito. En media hora llegamos a Quito, en ese intervalo nos dan un snack con un poco de bebida.

Cogemos un taxi por 6 $ hacia l’ Auberge Inn donde estuvimos antes de Las Galápagos y tenemos reservada una habitación. Entre una cosa y otra se hacen las 7 de la tarde con lo que ya es hora de cenar. Probamos el restaurante del hotel con un plato de pasta al pesto por 5,5$, una ensalada griega por 3,5 $ y una crepe de champiñones, queso, crema y jamón por 3,9 $. Todo muy bueno, se nota un cocinero europeo que ha enseñado a estas señoras a cocinar.

Conversamos un rato pero estamos un poco cansados y nos retiramos a nuestros aposentos.

Día 21:

QUITO – TULCAN – RUMICHACA – IPIALES – PASTO

Después de un buen desayuno en el hotel, cogemos un taxi hasta la estación de autobuses Imbabura que según nos han dicho son muy buenos y están a un paso de nuestro hotel. Nos cobra 1,5 $. Nos habían dicho que había buses cada hora desde las 3 de la mañana, pero la información no es correcta pues cuando llegamos a la estación nos dicen que el autobús siguiente es a las 3 de la tarde. Acaba de salir uno a las 8 y cuarto, pero hemos llegado tarde.

La vendedora dice que si vamos a la estación del norte en Carcelén que salen buses cada 10 minutos hasta Tulcán. Cogemos otro taxi que por 7 $ nos lleva. Tardamos más de media hora en llegar, pero en ese momento ya compramos el billete y salimos a los 2 minutos. Nos cuesta 5 $ por persona, y en teoría se tarda 5 horas. A la hora y media llegamos a Otavalo y a las 2 horas a Ibarra. Entran muchas personas vendiendo todo tipo de cosas, desde laxantes, hasta fruta, galletas, etc.

A Gabriel llegamos a las 4 horas de viaje. Pasamos por unos valles muy bonitos aprovechados con andenerías para burlar la pendiente que hay. Un poco antes de las 5 horas llegamos a Tulcán. Como la terminal está a más de un km de donde salen las busetas, cogemos un taxi por 3,5 $ que nos lleva a Rumichaca que está a 6 km. Hacemos cola para que nos sellen el pasaporte de salida de Ecuador. Cuando nos toca es muy rápido, el problema es que hay todo un autobús de Ormeño delante nuestro. Al acabar andas unos 150 metros y haces los trámites. Como no hay nadie es rápido. Allí mismo hay unas furgonetas que te cobran 1100 pesos por llevarte a la terminal de buses de Ipiales, o un taxi que te cobra 1.700 pesos por persona y han de ir 4 personas. Como la furgoneta está vacía optamos por el taxi, esperamos unos minutos pero como no vemos a nadie que quiera ir a Ipiales pagos 4 $ para salir ya. Como no tiene dólares para darme el cambio me da 1800 pesos de cambio de los 5 $ que le doy.

Al llegar a la terminal no hay cajero automático, con lo que le decimos de pagar con $ y aceptan. Los 3 billetes nos cuestan 10 $ a Pasto, y como no, sale ya.

Más tarde nos damos cuenta que debíamos haber pasado noche en Ipiales y visitar la Iglesia de Nuestra Señora de las Lajas que está a sólo 7 km de Ipiales.

Santuario de las Lajas (Foto cogida de un blog)

En 2 horas llegamos a Pasto y en la terminal de buses hay varios cajeros automáticos donde conseguimos dinero.

Los taxis en Pasto tienen unos precios fijos con lo que así te evitas regatear, es muy cómodo. Los trayectos en la ciudad cuestan 3500 pesos, al extrarradio cuestas 3800 pesos, al aeropuerto 7000 pesos y así sucesivamente. Lo tienen que tener a disposición del usuario, algunos lo cuelgan en el asiento y desde ahí lo ves fácilmente.

Nos lleva al hotel San Sebastián que en la LP lo pone bien. La triple nos cobra 70.000 pesos con baño y wifi en la entrada del hotel.

Plaza principal de Pasto

Tenemos que cambiar el baremo de medir ya que vemos que aquí en Colombia todo es más caro que en Ecuador o Perú.

Pasto tiene una población de 385.000 habitantes y está a una altitud de 2551 metros. La ciudad se encuentra a los pies del volcán Galeras, en el valle de Atriz. El clima es fresco, por la noche refresca mucho, mientras que durante el día puedes ir con manga corta.

Pasto fue un importante centro cultural y religioso tanto en la época colonial como en la republicana. Los terremotos han destruido gran parte de su herencia arquitectónica, aunque se han reconstruido un puñado de iglesias y palacios en el estilo original. La ciudad también es conocida por el barniz de Pasto, resina vegetal procesada que se usa para pintar piezas de madera de vivos colores.

Interior de una de las infinitas iglesias de Pasto

La iglesia más importante y céntrica es la de San Juan Bautista, data de los primeros días de la ciudad. Por dentro está cubierta de oro y por fuera tiene una estructura barroca. Justo enfrente está la oficina de turismo pero ya está cerrada. Buscamos una casa de cambio para cambiar dólares pero cierran a las 5 de la tarde.

Pasto es una ciudad con muchos bancos, comercio, restaurantes etc., el problema es que cierran muy pronto, vamos a alguno que nos dicen que cierran a las 7 y media no teniendo gran cosa para comer.

Hay una cadena que se llama Sabropan, donde cierran a las 9 de la noche y parece que tienen algo más de variedad. Nos recomiendan churrasco. Cuando nos lo traen es un filete de carne que parece la suela de un zapato, está malísimo, viene presentado en una plancha pero está tan hecho que no sabe a nada. Pedimos un trozo de pizza que solo hay hawaiana, y está muy dulce. Vamos, que no hemos tenido suerte, y aparte no tienen cerveza, un desastre. No es barato porque cada plato de churrasco cuesta 15000 pesos, unos 9 $.

Volvemos al hotel y no se ve a nadie por las calles.


Y continúa nuestra aventura en Colombia

  1. Excelente todo su recorrido y consejos!

  2. Hola, quiero hacer un viaje parecido pero en moto y entrando desde colombia, en cuanto a hospedaje y comidas en promedio cuanto gasto cada uno??

  1. Pingback: decididos!… de Perú a Ecuador «

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